Jorge Manzo, Arturo Molina/La Voz de Michoacán Michoacán forma parte de la red que se ha tejido para la ordeña de los ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex). El Grupo de Coordinación tiene plenamente identificada a la banda de criminales a la que le han asestado un duro golpe y en este año le han arrebatado más de 787 mil litros de huachicol, esto es un 60 por ciento más de lo que se logró en 2017. El gobierno de Andrés Manuel López Obrador ha lanzado una estrategia nacional para combatir el robo de hidrocarburos en donde participan 15 dependencias federales, entre ellas las secretarías de la Defensa Nacional, Marina, Gobernación y Hacienda. En el país se estiman más de 40 mil kilómetros de ductos que tiene la paraestatal. En el caso de Michoacán, la Marina se haría cargo de la terminal marítima que opera en Lázaro Cárdenas. La Secretaría de Seguridad Pública ha identificado que la violencia que se está registrando en Morelia, ubicada a más de 175 kilómetros de distancia, es producto de la pelea del territorio, así como del robo de combustibles. Esto último por la cercanía de los ductos de Petróleos Mexicanos en donde uno de los focos rojos está en el municipio de Cuitzeo, por donde atraviesa una línea. La primera acción del Gobierno federal consistió en el cese y remoción de funcionarios de la empresa encargados de ductos, así como la captura de tres. En este sentido, el Ejército Mexicano y la Marina asumieron el control de instalaciones estratégicas que tiene la paraestatal y se hará cargo de entradas y salidas de vehículos y pipas y desplegará una vigilancia exhaustiva. Si bien Michoacán no ha sido ubicado como uno de los centros de operaciones de los huachicoleros, sectores de la sociedad han denunciado que el comercio ilegal de gasolinas ha ido en incremento, incluso, a través del transporte público, mismo que ha sido negado por liderazgos del gremio asegurando que no existen condiciones para llevarlo a cabo. Tan sólo en 2017 fueron capturados 38 presuntos responsables por no acreditar la legal procedencia del hidrocarburo. En este año, de acuerdo con la Secretaría de Seguridad Pública se han dado pasos importantes, no obstante, no se ha dado un corte de aprehensiones hasta el mes de diciembre. Respecto a la puesta en marcha del Plan Conjunto de Atención a las Instalaciones Estratégicas de Pemex, el secretario de Seguridad Pública en el estado, Juan Bernardo Corona Martínez, reiteró la disposición absoluta del Gobierno del Estado para colaborar en el combate contra el robo de hidrocarburos. Recordó que a lo largo de la administración del Gobernador Silvano Aureoles, en coordinación con las fuerzas federales se han decomisado más de un millón de litros de hidrocarburos que habían sido adquiridos ilegalmente. Juan Bernardo Corona consideró que la estrategia contra este delito, como con cualquier otro, tendrá éxito con la decidida colaboración de todos los órdenes de gobierno y de la sociedad. Reiteró que el Gobierno del Estado realiza mesas de trabajo con el Gobierno Federal, diseñando la estrategia de seguridad que se implementará en conjunto en Michoacán. Puntualizó que la experiencia y los logros alcanzados en tres años serán la base de esta estrategia, en la que se seguirá combatiendo frontalmente delitos relacionados a la delincuencia organizada, entre ellos el robo de hidrocarburos. A nivel nacional, de acuerdo con Petróleos Mexicanos, durante 2016 se robaron 26 mil barriles de combustible aproximadamente (más de 30 mil millones de pesos); en 2017 arriba de 43 mil barriles diarios (50 mil 100 millones de pesos ), y para este año ya ronda el orden de los 58 mil 200 barriles al día (66 mil 300 millones de pesos). A mediados del año, las autoridades federales y estatales reconocieron que el robo y el trasiego del combustible robado en Michoacán no cesaba. Hasta ese momento ya habían sido confiscados más de 105 mil litros de gasolina y 44 mil de diésel. Para entonces, la Procuraduría General de la República había presentado a 20 detenidos por el delito. Han sido los municipios del norte del estado, entre los cuales se les incluye el municipio de Cuitzeo, Puruándiro, Huandacareo, y Copándaro, por donde ha iniciado la incursión de grupos delictivos que se dedican principalmente, al trasiego del combustible robado para su posterior venta en todo el estado. No obstante, La Voz de Michoacán publicó denuncias públicas en donde se exhibió que taxistas y automóviles de transporte público de Michoacán se han unido a las filas del crimen organizado que opera la compleja estructura de distribución de combustible robado en las zonas urbanas, rurales y carreteras del estado. En contubernio con un número no especificado de trabajadores del volante, los “huachicoleros”, estarían repartiendo miles de litros de combustóleo robado a plena luz del día. Investigaciones realizadas por esta casa editorial, así como trabajo de sondeo con operadores del transporte público, revelaron que ante las malas condiciones económicas en las que laboran miles de taxistas, así como a la necesidad de aumentar sus ingresos, han tenido que recurrir a transportar bidones de gasolina para ganarse “unos pesos extras”. Los trabajadores del volante, se encuentran plenamente confiados en que, al contar con placas, calcomanías y otros distintivos de transporte público, pueden pasar prácticamente desapercibidos con las cargas de combustible. El uso de taxis para el transporte del huachicol, no es privativo de Morelia. El esquema ha sido replicado en diferentes partes del centro del país en donde se han detectado diversos vehículos transportando cientos de litros a plena luz del día. Sin embargo, de acuerdo con José Trinidad Martínez Pasalagua, dirigente de la Comisión Reguladora del Transporte y que lidera a miles de concesionarios, negó que se estén presentando estos casos que han sido denunciados también por la Cámara Nacional del Autotransporte de Pasajeros y Turismo (Canapat), incluso, se atrevió a asegurar que lo mismo podrían estar cometiendo los choferes de esas unidades. Martínez Pasalagua aseguró que de entrada es poco lo que estarían ganando “si es que se están presentando estos casos”, mismos que reiteró que sería casi imposible puesto que las cajuelas en donde se supone que movilizan la gasolina robada son pequeñas. “Desconozco el precio, pero serían pocos litros los que estarían movilizando los taxistas”. “Es totalmente falso”, atajó.
La Voz de Michoacán
