José Luis Ceja / La Voz de Michoacán Jiquilpan, Michoacán. Año con año Michoacán se ubica en los primeros lugares en incendios forestales y este año no fue la excepción, ya que se ubicó en el cuarto lugar con más número de incendios a nivel nacional, pero se ubicó en el noveno en cuanto a superficie siniestrada, de acuerdo con el secretario del Medio Ambiente, Alejandro Méndez López. “Si nos comparamos con el resto de los estados, hubo una buena atención en el estado. El año pasado, 2021, tuvimos 600 incendios, poco más de 560 este año, pero la superficie de hectáreas afectadas fue 30 o 40 por ciento menor. El año pasado tuvimos 35 mil hectáreas afectadas y este año, 20 mil”. Ello, dijo, habla de que este año se realizó un buen trabajo conjunto entre la Comisión Nacional Forestal, la Comisión Forestal de Michoacán, Protección Civil y la participación de los municipios, además de una inversión extraordinaria por parte del Ejecutivo estatal en esta materia por el orden de los 10 millones de pesos. “Cuando vimos que era muy duro el problema, el gobernador autorizó un presupuesto extraordinario de 10 millones de pesos sobre los tres que estaban presupuestados y apoyó con el uso del helicóptero para el traslado de brigadistas, herramienta, comida y agua”. El funcionario estatal destacó que si bien es complicado determinar cuántos de los incendios registrados este año fueron provocados, también es cierto que es difícil determinarlo. “Históricamente se habla de que un 60 a un 80 por ciento de los incendios son provocados, son quemas agrícolas que se salieron de control o intencionalmente para intentar hacer un cambio de uso de suelo”. Destacó que ante la Comisión Forestal se han presentado ya 80 denuncias de lugares en que se ha identificado que los incendios fueron intencionados y que se pretende hacer un cambio de uso de suelo. “El gobernador nos instruyó que todos esos sitios donde se percibe que puede haber una intención de cambio de uso de suelo se van a decretar como áreas de restauración ambiental”. Destacó que aunque la Ley Forestal ya lo prohíbe, a través del gobierno del estado no se permitirá el cambio de uso de suelo en espacios siniestrados de manera intencional al menos por 20 años. “Eso ya está en la ley, lo que vamos a hacer ahora nosotros es que vamos a decretar esos predios como área de restauración forestal para efecto de que se elabore un programa de manejo de restauración del bosque en esos sitios, inscribir en el Registro Público de la Propiedad que estos predios no tengan otro destino que el forestal. Si algún dueño de estos predios pretende hacer una huerta de aguacate y venderla o establecer una huerta, no lo vamos a dejar”. Forestación y reforestación Debido a que la Comisión Forestal de la entidad heredó poca planta de la administración anterior, el secretario del Medio Ambiente puntualizó que en este año se empezará con la siembra de semilla para poder contar con plantas el próximo año. “La Cofom recibe alrededor de dos millones, dos millones y medio de plantas en los viveros de la Comisión Forestal y esto es poco para las necesidades del estado”. En ese sentido, dijo, la propuesta de la Comisión Forestal es que se haga una cuidadosa planeación para evita que las plantas se desperdicie o no sea utilizada adecuadamente. Regularmente, durante el periodo de lluvias, organizaciones ambientales y ecologistas solicitan plantas de los viveros de la Cofom u otras dependencias para realizar una reforestación que muchas veces carece de planeación, lo que lleva a la introducción de especies no adecuadas al clima o tipo de suelo. “Somos uno de los estados con mayor diversidad biológica del país y del mundo y no había necesidad de traer árboles de otro lado pero fueron decisiones que en su momento tomaron las autoridades; ahora lo que se pretende es que sean especies nativas, de preferencia germoplasma local”. En ese sentido, dijo, es importante atender a la vocación de cada una de las especies. “Hay especies para madera, resina, y hay una selección genética para esos objetivos, hay otros programas que son plantación para restauración forestal, para tratar de restaurar el ecosistema forestal que existía, y ahora hay otra con finalidad educativa. Hay reforestaciones de un número pequeño de árboles en zonas urbanas o periurbanas y ahí la finalidad no es ver cuántos árboles se plantan si no cuántas personas se educan y se sensibilizan a través de estos programas”.