Arturo Molina / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. Ante la inminente crisis hídrica nacional, Michoacán, la Ciudad de México y Estado de México sumaron esfuerzos para rescatar la capacidad de almacenamiento del Sistema Cutzamala y las presas que suministran el agua a millones de habitantes de la capital del país. El sistema que abastece hasta 21 millones de personas en el Valle de México ya alcanzó niveles reducidos de almacenamiento durante los últimos 3 años, tanto en las presas de Michoacán como del Estado de México. Con base en lo anterior, a partir de este mes de julio comenzará el proyecto de tecnificación de riego para apoyar a los productores de la región Oriente de Michoacán. La inversión total contempla 300 millones de pesos provenientes del fideicomiso del Cutzamala. En total, mil 600 agricultores de 5 municipios de Michoacán se verán beneficiados por el proyecto de tecnificación impulsado por los recursos por servicios ambientales generados por los estados que integran la Megalópolis. Desde el municipio de Zitácuaro, los gobernantes de los tres estados convinieron a la necesidad de hacer más eficiente el uso del recurso hídrico en las zonas productivas a través de proyectos de apoyo al campo. La tendencia de almacenamiento en el Cutzamala está cercana a las cifras de crisis. Durante 2021 se alcanzaron los niveles más bajos en las presas. Por lo anterior, la intención es tener mayor control de los escurrimientos hídricos que llegan a la Presa del Bosque y La Villita, como los principales abastecedores del sistema desde el lado de Michoacán. A decir del gobernador Alfredo Ramírez Bedolla, lo anterior representa un avance sustancial en el control del vital líquido. Aclaró que si bien se busca erradicar la extracción ilegal el agua en que se incurrió durante décadas por la falta de permisos, con el proyecto de irrigación se impulsará el desarrollo de los cultivos de aguacate, berries, guayaba e incluso duraznos. “Tenemos una inversión histórica porque por primera vez, el fideicomiso 1928 son 300 millones de pesos que verdaderamente es muy importante para el estado. Es un momento estelar en la vida de Michoacán y la historia de la región. Estoy satisfecho y con mucho ánimo con lo que estamos logrando", manifestó el mandatario estatal frente a sus homólogos. Por su parte, la doctora Claudia Sheinbaum, jefa de Gobierno de la Ciudad de México, advirtió sobre el panorama de crisis hídrica a la cual se enfrenta el país en la actualidad. Tras citar el caso de Nuevo León y otros estados de norte, llamó a que las entidades sumen esfuerzos para cuidar el vital recurso. “Esto es histórico. Durante muchos años el desarrollo del país estuvo orientado al centro junto con las inversiones y así se hizo el Sistema Cutzamala. Son más de 15 mil metros cúbicos por segundo y que alimentan a los habitantes de la zona metropolitana. Por primera vez le regresamos a Michoacán lo que tanto nos ha dado a beneficio de los agricultores. Es un proyecto donde ponemos 300 millones de pesos, recursos lo que se paga de agua en un fideicomiso”, señaló. Por su parte, Alfredo del Mazo Maza, gobernador del Estado de México, enfatizó el punto histórico del nuevo convenio con el estado de Michoacán. Es la primera vez que un estado fuera de la Zona Metropolitana recibirá recursos provenientes del fideicomiso del Sistema Cutzamala. Recordó que a casi 50 años de que comenzó a operar, las necesidades de agua siguen creciendo tanto en el Estado de México como en el resto de entidades y ciudades que integran a la Zona Metropolitana. “Esta iniciativa que hoy se firma nos permite invertir estos recursos en mejorar y agradecer a los agricultores en fortalecer los distritos de riego de cinco municipios de miles de hectáreas. Son más de 1 mil 600 productores beneficiados. Nos permite eficientar (sic) el Sistema Cutzamala hacia el Valle de México. Son más de 21 millones de mexicanos los que viven en el Valle de México y que se verán beneficiados por eficientar el sistema Cutzamala", explicó. El costo ambiental por la manutención del Sistema Cutzamala es bastante alto. Las reservas de agua de Oriente de Michoacán se reducen a un ritmo de 0.5 por ciento al año, situación que ya genera preocupación a los científicos debido a que esto podría generar una ruptura en el sector económica en un plazo no mayor a diez años. Michoacán aporta al menos el 30 por ciento del consumo de agua que se suministra a través del Sistema Cutzamala y no recibe pago por servicio ambiental por parte de los estados que se encuentran en el Valle de México. El manejo y cobro del agua a nivel nacional está en manos de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), dependencia federal a la que desde hace 20 años se le ha insistido tanto por parte de obreros como de activistas que retribuyan para servicios ambientales y la protección de los bosques que generan el agua que consumen.
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