Adrián Bucio / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. Kassandra Valencia tiene la sensación de que cada prenda que hace lleva una parte de ella entre las telas y las costuras. Es como si al término de cada pieza, ella se arrancara un pedacito de sí y lo pusiera en los hilos, y solo entonces supiera que está terminada. “En cada creación y diseño mío yo imprimo mi personalidad”, dice. Kassandra Valencia es una joven de 19 años nacida en Los Ángeles, California. Es una mujer de cabello negro, largo y chino, complexión delgada, estatura alta, tez de piel blanca, ojos oscuros. Es licenciada en Diseño de Moda egresada del Instituto Innardi y tiene una marca de vestidos de noche y moda vanguardista que funciona a través de internet y se llama Kavahe. Luego de la sesión fotográfica en el Hotel Boutique Maja, nos sentamos y comenzamos la entrevista. ¿Cómo fue tu infancia? Fue muy divertida. Una parte de ella la viví en Estados Unidos y otra acá en México. Recuerdo que jugaba con mis primos y nos hacíamos bromas. Éramos algo traviesos; nos escondíamos y llenábamos nuestras horas de ocurrencias. Convivíamos mucho. Fue una etapa muy bonita, llena de alegría. Creo que lo mejor es esa parte de jugar sin preocupaciones de nada. Fui una niña muy feliz. De pequeña, ¿cómo fue la relación con tus papás? No recuerdo que nos hayamos disgustado de manera fuerte; somos muy unidos. Ha sido, hasta la actualidad, una relación llena de respeto y buenos momentos en familia. Yo soy la quinta de siete hijos, y entre todos nos llevamos muy bien. Mis papás son mis mejores amigos y siempre me apoyan en todo. ¿Cómo era Kassandra de niña? Yo te diría que muy tranquila. A pesar de que hacía algunas travesuras, nunca ha sido algo frecuente en mí. No me gusta hacer cosas que tengan consecuencias negativas, y desde pequeña tuve esa preferencia por la tranquilidad. Además, iba a muchas actividades como ballet y salto de longitud, y competía en dichas disciplinas. En ese entonces, ¿qué querías ser de grande? Cuando me hacían esa pregunta, yo respondía una sola cosa: veterinaria. Desde muy pequeña me empezaron a gustar los animales. Mi sueño era criar específicamente a las especies en peligro de extinción para evitar su muerte y que prevalecieran. Creo que eso tiene que ver mucho con mi familia; siempre me educaron para cuidar la naturaleza y protegerla. Por eso respondía con esa certidumbre. ¿Cómo ha sido tu relación con la escuela? Siempre he sido una niña muy aplicada. En la escuela, por ejemplo, era la niña que siempre llevaba sus tareas y entendía todo lo que los maestros enseñaban. Desde pequeña he tenido reconocimientos por mi destacado aprovechamiento y mis excelentes calificaciones. Estuve varias veces en el cuadro de honor y recuerdo que todos me decían que era muy inteligente para eso de estudiar. ¿Por qué decidiste estudiar Diseño de Moda? Cuando fui creciendo descubrí que mi gusto por la moda había estado en mí desde siempre. De pequeña, yo dibujaba ropa en mis libretas, y a mis playeras y pantalones siempre les buscaba algo para añadirles. Entonces, cuando estaba a punto de terminar la preparatoria, hablé a Innardi para buscar ese sueño. Me dijeron “aquí te esperamos, ven”. Y empecé mi carrera en Diseño de Moda. Además, uno de los motivos por los que me motivé a seguir en la carrera fue por Patricia Wences; ella ha sido mi inspiración y siempre me ha impulsado a lograr mis metas. ¿Qué fue lo que te costó más trabajo en la carrera? Me acuerdo que, al principio, me costaba un mundo manejar las máquinas de coser. La primera vez que vi una no sabía ni cómo tomarla. Yo nunca había cosido prendas con dichos aparatos y me llevé algo de tiempo en aprender. Sin embargo, cuando aprendí se volvió una de mis partes favoritas del proceso para elaborar una prenda. ¿Cuál es el proceso que se sigue para crear una prenda? Lo primero es bocetar. Generalmente, en esta parte se busca una fuente de inspiración. Yo pienso en las cosas que me gustan, y a la vez, analizo qué esta de moda. Depende mucho de las tendencias: por ejemplo, si las frutas y las flores son tendencia, entonces yo pienso en el kiwi porque es un fruto que me encanta. Con base en eso realizo la prenda; siempre trato de imprimir mi personalidad en mis diseños. Después del boceto, se ilustra en digital. Posteriormente se patrona sobre papel en tamaño real, se saca un molde, se pasa a la tela, luego se corta y confecciona, vienen los acabados finales y listo, la prenda está terminada. ¿Qué haces en tus ratos libres? Me gusta mucho modelar, aunque lo hago más como un pasatiempo que como un trabajo, es algo que me agrada. He participado en pasarelas de moda y sesiones fotográficas; me gusta participar en las dos actividades. Me encanta leer. También suelo salir con mis amigos y amigas: voy al cine, al café y a fiestas. De repente, me dedico cambiar el diseño de mi casa o de mi cuarto; acomodo floreros, cambio cosas de lugar y demás. El diseño de interiores también me llama la atención. ¿Cuáles son tus metas? Quiero estudiar la maestría en Alta Costura en España. En poco tiempo me iré a vivir a Alemania y creo que con eso se me puede facilitar dicho objetivo. A largo plazo quiero consolidar mi marca Kavahe, que es de vestidos de noche y moda vanguardista, en el mercado. ¿Quién es Kassandra Valencia? Es una mujer divertida y que se alegra con la vida. Es soñadora y muy apasionada por sus actividades. Además, es una persona muy responsable y puntual. También tiene un espíritu de aventurera y toma los retos sin miedo alguno. Agradecemos al Hotel Boutique Maja por las facilidades otorgadas para la sesión fotográfica.
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