Angélica Ayala / La Voz de Michoacán Pátzcuaro, Michoacán. Con la meta cumplida en ocupación hotelera del 100 por ciento y posiblemente superada la derrama económica esperada de 5 millones de pesos, concluyó el Festival Internacional de Globos de Cantoya “Encantóyate”. La algarabía de los espectadores cada vez que un globo elevaba el vuelo era evidente, con aplausos o gritos festejaban la elevación del globo. Por pequeño, grande o muy grande que fuera, los nervios de los globeros terminaban cuando lo soltaban y veían que cumplía el cometido, la tristeza y frustración de otros que veían su esfuerzo quemarse y caer en el tejado. Durante los tres días de actividades se percibió el ambiente familiar. Se podían ver grupos de jóvenes que acudieron a ver los globos de cantoya, así como familias completas conviviendo, incluso algunos turistas extranjeros que, curiosos, observaban cada detalle de la elevación o de los puestos de comida o de las artesanía. “So beautiful”, expresó uno de ellos, que iba acompañado de sus hijas y esposa, quienes, asombradas, no paraban de tomar fotos a los globos de gran tamaño. Foto, Angélica Ayala. “¡Mira, mami!”, expresó una pequeña al ver que varios de los globos que fueron elevados previamente pasaban por su casa a gran distancia. “¡Se van al cielo!, ¡mira, están bien bonitos y bien grandes!”, en especial le gustó uno de color blanco con varios picos, otro más parecía una pirámide que flotaba y se movía con el viento, “es de muchos colores”, expresó mientras sus ojos no perdían las figuras que sobrevolaban por el lugar. El presidente municipal, Julio Alberto Arreola Vázquez, informó que como en todo evento hubo algunos errores; sin embargo, en lo general ha tenido buenos comentarios tanto sobre la organización como acerca de los eventos culturales y musicales presentados a partir del viernes y hasta este domingo. “Estamos muy contentos, ha habido mucho movimiento, mucha derrama económica, ayer (sábado) estuvo a reventar, incluso hubo restaurantes que terminaron toda su comida y tuvieron que negar el servicio”. Foto, Angélica Ayala. Dijo que muy posiblemente se superaron las expectativas en cuanto a derrama económica, esto debido a que durante todo sábado y domingo, principalmente, tanto las cafeterías como las tiendas, expendios de comida y restaurantes estaban con un lleno total, incluso hubo lugares en que los comensales tenían que esperar a que se desocupara alguna mesa. Otro de los aciertos, consideró Arreola Vázquez, fue la restricción en la venta de bebidas embriagantes, lo que propició que fuera un evento muy familiar. “Estamos muy complacidos en este tema, como parte de la organización del evento, hablamos con los dueños de los bares y negocios en donde se vendieran bebidas alcohólicas y acordamos cierta moderación en la venta y la restricción de horario, eso de alguna manera ha sido importante”. Foto, Angélica Ayala. En relación con el tema vial, el edil dijo que, de acuerdo con los comentarios de visitantes y propios lugareños, fue una buena decisión el no haber cerrado al tránsito vial las calles que circundan la Plaza Vasco de Quiroga, pues a pesar de que el tráfico fue lento, era constante, “algo que ayudó, ya que al no haber cerrado la plaza hubo mayor circulación, a lo mejor un poco lenta pero siempre fue fluido el movimiento, eso la gente lo vio bastante bien”. Las autoridades municipales estimaron que en el concierto estelar con la presentación de Los Claxons, realizado en la plaza principal en un gran escenario, acudieron poco más de 15 mil personas, todo en completa convivencia sana y sin ningún incidente. “Hasta el momento no se ha tenido ninguna novedad, el operativo va con saldo blanco”, informó el director de Seguridad Pública Municipal, Armando Hernández Villanueva. Es de mencionar que a Pátzcuaro arribaron 50 elementos de la Policía Turística, que apoyó a los visitantes y ciudadanos durante los tres días de actividades. Foto, Angélica Ayala. Los equipos participantes en el “Encantóyate” fueron de Francia y Colombia. De México acudieron globeros de Paracho, Cherán, Morelia, así como Tahkmek, Yucatán; los poblados de San Martín Toxpalan y Nazareno Etla, Oaxaca; del Estado de México participaron Zumpango y Chinconcuac. “¡Eso! ¡Bravo! ¡Adiós!”, eran las expresiones de la pequeña niña a unos metros de los globos de cantoya. Había perdido el miedo de verlos tan grandes de cerca. Al elevarse, con su mano les decía “adiós” y veía como se elevaban. Sin embargo, en algún momento uno de los globos empezó a caer directo al público y todos reaccionaron de inmediato, los asistentes rápidamente se movieron del lugar para que cayera, los policías los acordonaron y bomberos aventaron un chorro de agua para apagarlo, salpicando a más de alguno. Otro más cayó en el techo de una de las casonas aledañas. Foto, Angélica Ayala. Esto no fue motivo de desánimo para los asistentes que de igual forma aplaudieron y felicitaron a los globeros. Uno de los más vistosos fue el de Yucatán, que colgó más de mil luminarias que fueron directamente al cielo.