Redacción / La Voz de Michoacán Ciudad de México. El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ofreció este primero de septiembre su Cuarto Informe de Gobierno, en el que dijo que pese a la caída de la economía, se logró recuperar el nivel previo a la pandemia por COVID-19 y anticipó que la “Cuarta Transformación triunfará en el país”. “Les confieso que ahora poseo más aplomo y serenidad que antes. Ha crecido aún más, esto sin duda, mi respeto y el amor al pueblo. Creo con racionalidad, con mística y con optimismo que triunfará la Cuarta Transformación de México”, señaló el presidente, quien llegó este jueves al informe de su cuarto año de administración con altos niveles de aprobación. “Estoy feliz porque la revolución de las conciencias ha reducido al mínimo el analfabetismo político”, dijo el presidente. Aseguró que el gobierno no participa en fraudes electorales y que existe libertad religiosa y Estado laico. “Ahora más que nunca está presente que México es de los países con mayor riqueza cultural en el mundo”. El titular del Ejecutivo federal dijo que la corrupción no se tolera ni hay impunidad para nadie, además de que no hay lujos en el gobierno y los servidores públicos actúan con eficiencia y honradez. “El Estado dejó de ser el principal violador de los derechos humanos, el aumento al salario, el reparto de utilidades y los programas para el bienestar se han convertido en los medios de distribución de riqueza”. “En nuestro gobierno no hay personas como (Genaro) García Luna, no se permite la violación de derechos humanos, la autoridad no es cómplice ni tampoco ejecutora de torturas ni masacres, no se permiten relaciones de complicidad con nadie. Se combate la impunidad y no dejar sin castigo ningún delito. El caso Ayotzinapa es una prueba”, aseveró. Destacó que en México ya no domina la oligarquía sino un gobierno democrático, cuya prioridad son los pobres. Sobre la propuesta que mandó ayer para que la Guardia Nacional pase a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), explicó que el único afán es que se consolide y mantenga su disciplina y profesionalismo, y sobre todo, para que no se corrompa como sucedió con la antigua Policía Federal. Destacó que el objetivo no es militarizar, sino cuidar con la vigilancia el crecimiento sano de lo que debería ser la Guardia Nacional.
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