Jorge Ávila / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. Arropado por la plana mayor de Morena a nivel nacional y estatal, así como diversos actores políticos, pero, sobre todo, ante miles de personas que desde medio día abarrotaron la Plaza Valladolid, el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla encabezó un mitin luego de entregar su Primer Informe de Gobierno en el Congreso del Estado. El primero en tomar la palabra fue Mario Delgado, líder nacional de Morena, quien se dijo entusiasmado “al ver gobernantes como Alfredo Ramírez Bedolla”. Haciendo eco al discurso emitido por el mandatario en Palacio Legislativo, el líder partidista resaltó las políticas anticorrupción del gobierno federal, lo que, dijo, se ha replicado en Michoacán, “un estado que parecía destinado a sumirse en la violencia, la ingobernabilidad, la pobreza, en obstáculos para el desarrollo y parecía que iba a tomar mucho tiempo para resolverlo por tantos problemas que le dejaron al hoy gobernador.” Recordó lo que consideró trabas de las autoridades electorales, en alusión a la cancelación de la candidatura de Raúl Morón, que luego asumió Ramírez Bedolla. Foto, cortesía. El dirigente partidista señaló que este ha sido “un año de muchas acciones en beneficio de la gente”, de combate a la corrupción. Además destacó el pago a maestros y la política pública en la que, dijo, ahora sí se toma en cuenta a los municipios del estado. Mario Delgado además resaltó lo dicho por el gobernador en el sentido de la puntualidad en el pago a maestros y el que se hayan acabado los lujos, el orden en las finanzas y el que ya el gobernador no se pasee en helicóptero. Para cerrar su mensaje, el dirigente partidista remató con que Ramírez Bedolla es uno de los mejore alumnos de AMLO. Al tiempo que el dirigente de Morena hablaba, a un costado del área de prensa lograron entrar decenas de normalistas, quienes empezaron a gritar consignas y a mostrar cartulinas con sus demandas, como la estabilidad laboral para egresados, pero los simpatizantes del gobernador, conociendo su oficio, levantaron sus mantas de respaldo para invisibilizar a quienes protestaban. Al llegar el turno del gobernador al micrófono, la multitud de simpatizantes estallaron en júbilo, opacando las consignas de los manifestantes. El mensaje del gobernador no distó mucho de lo dicho ante el pleno del Congreso, en el sentido de que, señaló Ramírez Bedolla, “recuperamos el rumbo, no corrupción, no delincuencia, nuestro estado nos pertenece”. Recordó que el año pasado, cuando rindió protesta como gobernador, “era imposible transitar prácticamente por la mitad del estado. Había barricadas, miedo, gente armada, y el gobierno saliente estaba inmiscuido. Dejaron a su suerte a nuestro pueblo, lo abandonaron. Rememoró que en la anterior administración, encabezada por Silvano Aureoles, al magisterio se le debían 5 quincenas y “más de un millón de niños no tenían clases por la irresponsabilidad de un gobierno sin vergüenza que se robó el dinero de los maestros”. También recapituló la toma a las vías del tren que se prolongó por más de 100 días debido a la inconformidad de los maestros por los adeudos del gobierno, pero eso, dijo, frenaba el desarrollo al mantener incomunicado al Puerto de Lázaro Cárdenas. Esto se complicaba por la situación financiera de la entidad. “Así nos entregaron la administración del gobierno, con las cuentas bancarias en ceros. No nos dejaron una crisis, nos dejaron cientos de crisis”. Señaló además que para revertir la problemática, de restableció la alianza con el gobierno federal y se intensificó el trabajo con los alcaldes michoacanos sin importar su militancia. Pero también, dijo, “recuperamos la confianza, trabajamos con los diputados locales sin importar su partido”. De esta manera, “en un mes se liberaron las vías y se les pagó a los maestros sus salarios, bonos, aguinaldos y prestaciones”. Mientras los normalistas lanzaban consignas que casi no se oían, puso énfasis en que su gobierno es aliado de la educación y de los maestros. “Somos aliados del magisterio. Educación laica, universal y pública. Quiero reconocer a los maestros su vocación de educadores y formadores del pueblo”. En materia de finanzas, recordó que cuando asumió el cargo había un desfalco financiero de 50 mil millones de pesos en las finanzas. “No había ni para pagar a diputados, jueces, no llegaba el dinero a los municipios. Entonces implementamos la austeridad, la honestidad y el manejo eficiente del recurso, porque el presupuesto de Michoacán no es de los funcionarios, es del pueblo; no es nuestro, es de ustedes”. Ante la entusiasmada multitud, Ramírez Bedolla presumió que en 2021 “cerramos el año pasado muy bien y este año, por primera vez en décadas, va a haber y hay liquidez para cerrar el año, les vamos a pagar prestaciones y aguinaldos a todos los trabajadores del gobierno, médicos, enfermeras, maestros, ni faltara recurso para la Universidad Michoacana. Señaló además que este saneamiento de las finanzas fue posible gracias a la lucha contra la corrupción. Al cerrar esta parte, el mandatario recalcó voz en cuello “¡no somos iguales!”, en franca alusión al anterior gobernador de Michoacán, lo que hizo estallar el júbilo de sus simpatizantes, quienes se pusieron de pie al grito de “¡Bedolla, Bedolla!”. Al bajar la intensidad de la ovación al gobernador, los normalistas presentes comenzaron a hacer ruido y alzar sus cartulinas, pero el gobernador les lanzó el dardo: “En materia educativa ya no hay plazas automáticas. Ya no se venden las plazas de maestro, esas plazas son para los normalistas, nada más, sin injerencia de sindicatos”. Y es que recordó que, según él, antes de su gobierno, se vendían en 50 mil u 80 mil pesos las respuestas del examen para ingresar a las Normales, “ahora nada de eso, ahora es a través del Ceneval, como parte de la guerra contra la corrupción. Vamos a defender la educación pública”. Finalmente, el mandatario resaltó la buena relación que tiene su gobierno con el empresariado, sin negocios personales, sino generando oportunidades para atraer inversiones.