Juan Bustos / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. Los albergues escolares y casas-escuela en Michoacán presentan un rezago de 40 años en su infraestructura y han padecido desvíos de hasta el 90 por ciento de sus recursos ante la falta de marcos normativos, por ello el magisterio institucional ha presentado el “Proyecto para generar marco legal, reglas de operación y estabilidad laboral en los albergues escolares rurales y casas escuela del estado de Michoacán”. En entrevista, el presidente de la Comisión Ejecutiva en la entidad, Héctor Astudillo García apuntó que la propuesta se entregó a la Coordinación de Unidades Regionales y desde hace cuatro meses se estableció una comisión mixta la comisión entre la Secretaría de Educación en el Estado (SEE) y la Comisión ejecutiva de la Sección 18 del SNTE. “Se instaló la mesa de trabajo y se hizo entrega física del documento para que pase al análisis del área jurídica para que pudiera ser autorizada la titular de la SEE y turnada por el gobierno del estado”, indicó. Apuntó que el nombre de la iniciativa representa un precedente histórico en la educación de la entidad, toda vez que, a más de 40 años de existencia de citados espacios escolares, es la primera ocasión que se realiza este tipo de propuesta por escrito en beneficio de la niñez, las comunidades marginadas y los trabajadores de dichas instituciones educativas. Documento, pionero Reveló que es un documento de este tipo no existía y por ello se elabora ante una necesidad visible, ya que luego arriban a la Secretaría funcionarios que se les ocurre que para economizar hay que cerrar los albergues, “donde no solamente hay afectación al trabajador sino a los cientos de alumnos que van por necesidad a esas instituciones porque de otra manera estarían en el abandono educativo”. Apuntó que más que plantear la asignación de un recurso, “lo que planteamos es certeza jurídica para que la institución no se toque, certeza laboral para que los trabajadores no queden sujetos a la discrecionalidad del funcionario que detrás de escritorio, toma decisiones sin conocer la realidad de las escuelas”. “Buscamos que al haber certeza jurídica el recurso no sea desviado, aunque haya necesidades en otro sector, que el recurso sea etiquetado y que sea auditable, esto dará mucha certeza”, indicó Héctor Astudillo. Manifestó que dentro del SNTE se tiene información de que se han desviado recursos, “el 90 por ciento de desvío de los recursos en la pasada administración, donde incluso albergues que tenían el derecho de recibir calzado escolar dejaron de recibirlo, junto con ello la parte material y a la falta de equipos y las computadoras”. Aseguró que incluso el magisterio ha estado entregando equipo de cómputo con el recurso de los maestros; “hasta seis equipos donde se le ha pedido la concurrencia de la SEE, a pesar de que la dependencia maneja recursos públicos y es su obligación la dotación de estos elementos”. El dirigente indicó que todos los albergues requieren de una atención de inversión mayor, porque sus instalaciones responder a la realidad de hace 40 años, todos requieren conectividad y equipamiento de cómputo. “Lo que se requiere es un recurso extraordinario del gobierno del estado y de los gobiernos municipales para que volteen a ver esas escuelas, si una escuela regular requiere son niños en condiciones muy particulares de agresión familiar y hasta abuso familiar y que dependen de lo que se les pueda dar en las escuelas”, indicó. Proyecto estatal Es importante señalar que desde inicios del año pasado la Secretaría de Educación del Estado (SEE) ha impulsado el proyecto de un Sistema Estatal Único de Albergues Escolares, en la idea de fortalecer la atención en dichos centros educativos que brinda asistencia y educación en zonas alta marginación en la entidad en 52 puntos de Michoacán, expuso Martin López Ortiz director General de Unidades Regionales. En charla con esta casa editorial, el funcionario estatal expuso que el trabajo en los últimos meses para atender los albergues y casas escuelas ha sido positivo, para dar continuidad en la atención a niños que no tienen familia o son de escasos recursos económicos. “Cada albergue tiene un promedio de 55 estudiantes, se atiende desde nivel primaria a secundaria, lo que hicimos desde la llegada a esta administración es hacer un diagnóstico de cada uno de ellos, para generar condiciones seguras en el regreso de los alumnos como marcaron las autoridades sanitarias”, indicó. Agregó que una de las primeras acciones es destinar un recurso económico, para rehabilitar los albergues muy abandonados, vandalizados y saqueados, “destinamos dos meses del recurso ordinario para que se utilizaran en la rehabilitación de los mismos, esto fue exitoso porque hay otras condiciones totalmente diferentes, eso con recursos de la federación y el estado”.