Jorge Manzo / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. El secretario de Seguridad Pública afirma tajante que con la estrategia que se ha desplegado se han recuperado terrenos y puso varios ejemplos. Acusó que en el pasado no existió una alineación correcta entre la federación y el estado y esa falta de comunicación propició que la delincuencia aprovechara los vacíos. Confió que, de seguir en este paso, en un par de años las cosas se podrán recomponer en el estado. Cara a Cara para los lectores de La Voz de Michoacán, el general José Alfredo Ortega Reyes evaluó que a más de un año de esta administración puede definir que el estado vive un momento diferente y considera que se ha avanzado mucho en la reducción de la incidencia delictiva, principalmente en los homicidios dolosos. Al hacer un análisis, dijo, en noviembre de 2021 se registraron 276 homicidios, mientras que en el mismo mes, pero de 2022 se tuvieron 166 “son 73 homicidios menos, y eso sustenta decir que vivimos un momento diferente”, dijo el general, tras agregar que otros conflictos como la toma de las vías del tren o carreteras, ya no se registran. Recordó que cuando él llegó al mando de la Secretaría había 76 barricadas. Retoma los análisis nacionales que explican la reducción de algunos delitos, y destaca que este fenómeno se podría deber a que hay mayor presencia de las fuerzas federales, cosa que ocurre en el estado, en donde se despliegan hasta 600 operativos diarios y se recorren más de 13 mil kilómetros todos los días. Ortega Reyes confesó que desde que llegó a la Secretaría de Seguridad Pública ha tenido total respaldo de las fuerzas federales –Ejército Mexicano y la Guardia Nacional-. Compartió que en Michoacán se tienen 23 bases de operaciones interinstitucionales, varias de ellas ubicadas en zonas que vivieron momentos complicados como Ario de Rosales, en donde “la gente está trabajando para un mismo esfuerzo que es la seguridad”. El maestro en seguridad nacional recordó que la primera visita el presidente Andrés Manuel López Obrador en Michoacán durante el mandato de Alfredo Ramírez Bedolla se gestó la coordinación con las fuerzas federales y en la tierra caliente se avanzó hacia la recuperación de Tepalcatepec “hasta que la población se fue acostumbrando”. Después continuó la estrategia 66 kilómetros más adelante hacia Coalcomán y Aquila. En febrero se hizo el trabajo operativo de Apatzingán a Aguililla, en donde la delincuencia organizada mantuvo copada la zona, mientras que en junio se dio de Ario de Rosales a La Huacana. En julio se hizo lo propio de Zicuirán hacia Churumuco y se estableció una Base de Operaciones Interinstitucionales “y con esa presencia ya se han recuperado espacios”, resaltó el secretario de seguridad de Michoacán. Son avances, pero la gente se sigue sintiendo insegura y lo muestran las diferentes encuestas que se hacen al respecto. ¿Cómo decirle a la sociedad que en efecto se está avanzando?, y más después de hechos estridentes en lugares públicos como la Monumental Plaza de Toros o en restaurantes. “Yo le diría a la sociedad que tenga una percepción, que vea está estructura llamada Guardia Civil con un voto de confianza en esta operatividad y que sean más perceptivos. En Michoacán no hay ataques que siembran el terror en centros comerciales, no queman las tiendas de conveniencia como en otros lugares, no hay bloqueos con quema de vehículos para aislar un área, los hechos que se han dado son por movimientos sociales. En Michoacán no tenemos ataques a instalaciones de seguridad pública. Tampoco tenemos fugas de reos cómo ocurre en otros estados. En Michoacán no tenemos caminos bloqueados”. Y esto de la Monumental, en restaurantes y los demás. ¿A eso qué respuesta le podemos dar? “Lo de la Monumental (ataque afuera del concierto de Dany Ocean) fue un conflicto entre grupos delincuenciales. Es el intento de seguir trabajando en esta ciudad capital. A veces llegan a niveles de conflictividad y desesperación. Desde febrero tenemos el operativo de Blindaje Morelia y Zamora y por eso están desesperados”. Podríamos enumerar más casos como lo que ocurrió en Penjamillo, lo que ocurren en Aguililla, con Hipólito Mora y lo que derivó. ¿Estos hechos que están ocurriendo no preocupan? “No, porque se atienden. El caso de Penjamillo se supo que políticamente fue la decisión del Cabildo que no me toca a mí. Me toca atenderlo desde el área de seguridad pública. Se atendió en el marco del segundo eje de reforzar municipios vulnerables. Le dejamos estructuras de director, subdirector y elementos haciendo la función de la Guardia Civil. Con eso sumamos 13 municipios reforzados”. ¿Cuántos están en situación de vulnerabilidad? “Son 12 o 13”. ¿Y lo que se vive en La Ruana? “Hice lo propio. Fue en diciembre. Ahora está la Guardia Civil con elementos municipales. Con el tema de Hipólito, él mencionó en las redes sociales que había sido atacado y que había disparado en defensa. Yo no tengo más información. Lo que sí es que desde el punto de seguridad se le brindó seguridad a la región, no al actor sino a la región con patrullajes, porque el actor tiene protección federal”. Esta es la pregunta que todo mundo se hace. ¿Cuál es el grupo que manda...? En algún momento un secretario me decía que eran 4 grupos. ¿Michoacán no está controlado? “Yo no tengo esa percepción. Estaríamos hablando de un concepto de ingobernabilidad y no. Siguen los presidentes municipales, sus cabildos. Presionadas si quiere, pero ahí siguen. La pregunta de si está mandando algún grupo, lo que genera la violencia es precisamente la superposición de grupos delincuencia. Hay muchas regiones, en la zona oriental de Maravatío, hay dos grupos queriendo ejercer presión en la región y en ese acercamiento es cuando llegan a tener conflicto. En guerra irregular se le conoce como superposición de enemigos. Esta superposición pues el problema es que la autoridad no los conoce, salvo a algunos líderes que ya están identificados, pero no conoce a los grupos. Los puede percibir, pero ellos entre sí, sí se conocen y nos ubican. Se empiezan a superponer en la búsqueda de los intereses y surgen los choques. Pasa en Nuevo San Juan, en Uruapan, aquí mismo en Morelia”. Al hablar de lo que está ocurriendo en Morelia, el secretario de Seguridad Pública destacó su importante, y los esfuerzos que se están haciendo, incluido el reconocimiento que se le ha hecho a la Policía de la ciudad. Recordó que poco a poco se han ido recuperando espacios, pero reconoció que es una ciudad muy peleada. Celebró que, a pesar de los intentos, se han logrado dar duros golpes a la delincuencia. ¿Cuál es la radiografía que tiene usted de Morelia? “Es un municipio muy importante, recientemente las Naciones Unidas reconoció a la Policía Morelia y reconocen que están haciendo esfuerzos en la seguridad pública. Es tan grande (Morelia) con las tenencias. En Santa María se sentía un ambiente muy tenso, sin luz, con halcones en algunos puntos y la delincuencia presente, eso me tocó percibir. Fui en estos días y encontré una plaza iluminada, me puse a platicar con ellos y me di cuenta que está muy recuperada esta tenencia”. Morelia es ciudad grande e importante y que es peleada… “Es muy peleada. Principalmente en la periferia de Morelia. No obstante, se ha logrado perpetrar importantes aseguramientos”. ¿Qué se necesita para Morelia? Vemos de repente tranquilidad y luego se sueltan en un mismo día los multihomicidios “Tener un dispositivo fuerte con las tres fuerzas. Desincentivar el consumo (de drogas) porque si usted ve las lamentables muertes son consumidores que entran al círculo vicioso”. ¿Van de la mano los tres órdenes de gobierno en Morelia? “Sí. Casi a diario vienen los representantes federales todos los días y tenemos una junta de Coordinación. Se le da la parte central a la Policía Morelia y nosotros resguardamos la salida de Morelia”. ¿Algo de lo que los michoacanos se puedan preocupar en una zona en concreto? “Yo creo que no. Yo traigo todo un dispositivo, pero percibo mayor seguridad en todo el estado y obviamente hay pequeñas regiones en todo el estado donde la situación es de mayor conflicto, pero no de mayor peligro. Por ejemplo, algunos puntos de tierra caliente donde hay algunos grupos, pero si un ciudadano normal pasa por ahí no le va a pasar nada”. ¿Cómo resumiríamos estos meses? “Lo resumiría en un gran esfuerzo de toda la secretaría para avanzar en el marco de la estrategia. Tengo algunos datos que no los olvido y es que hemos remitido a más de 4 mil delincuentes y llevados a la fiscalía, hemos detenido al Centro Estatal de Detención Administrativa a más de29 mil. Ese número por sí solo habla de fallas en el tejido social. Como 2 mil 500 mensuales, casi 80 diarios y es gente que comete faltas, consumo de alcohol. Se han logrado tener los mayores aseguramientos por parte de la Guardia Civil, toneladas de marihuana, cristal, estamos hablando de 600 armas. La estrategia en sus tres ejes de esfuerzo con los municipios y los estados que nos rodean, sumando la estrategia adicional como la cumplimentación de órdenes de aprehensión, hemos logrado estos resultados”. ¿Michoacán avanza a la tranquilidad...? ¿Cuánto tiempo necesitamos para que la ciudadanía lo empiece a percibir? “Yo creo que ya lo está percibiendo. Sabemos que Michoacán tiene una situación tan compleja... Tiene más de 40 años. Leía una obra de un ecuatoriano de los cultivos de opioides de los años 50 y hacían alusión a los pequeños triángulos dorados de Michoacán. Es una situación añeja de inseguridad pública, presencia de grupos delictivos, pero aún a pesar de ello se ha logrado recuperar muchos espacios de paz. Yo estimaría que estamos avanzando”. ¿Cuánto tiempo para que pueda componerse? “Yo considero que, contando con todos los apoyos, adaptando la estrategia a la situación actual de los grupos, estimaría unos dos años”. ¿Con todo esto que están haciendo ustedes Michoacán sigue siendo atractivo para los grupos delictivos? “Yo creo que ya no. O lo pensarían. Pondré un ejemplo que era muy atractivo el robo de autotransporte, se decía que se robaban hasta 3 nodrizas semanales. El último reporte que tuve fue de octubre del año pasado. Pusimos a trabajar la inteligencia y confirmamos que casi todos los robos se daban en el mismo lugar y a la misma hora. Recuperamos vehículos robados y pusimos un dispositivo fuerte en la autopista de occidente y no se han vuelto a robar nodrizas. Ahora se andan robando tabique. Ya no fue atractivo para los grupos”. Ortega Reyes confía que sigan en el mismo sentido avanzando para recuperarle la tranquilidad a los michoacanos. Garantizó que seguirá la coordinación con la federación para evitar esos vacíos que ayudan a la delincuencia. Con experiencia y carrera militar José Alfredo Ortega Reyes es el secretario de Seguridad Pública de Michoacán y también es consultor y maestro en seguridad nacional y especialista en inteligencia. Realiza estudios de doctorado en la Universidad Anáhuac. Su posgrado fue en el Colegio de Defensa Nacional especializándose En Seguridad Nacional. En la Guardia Nacional coordinaba la organización, funcionamiento y actuación de áreas especializadas en inteligencia, investigación, criminalística de campo, entre otras, mientras que en la Secretaría de la Defensa Nacional fue jefe de la Unidad de planeación estratégica, análisis, seguridad e inteligencia. Su formación es militar, y en sus manos está la responsabilidad de coordinar los esfuerzos en materia de seguridad pública de Michoacán, un estado que poco a poco se descompuso a raíz de la convulsión social que vivió y del avance de los grupos de la delincuencia organizada en varios territorios.