Maricruz Rios / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. En el último año no cedió la informalidad laboral en Michoacán. Pese a los esfuerzos de autoridades por incentivar la conversión y creación de plazas en el mercado formal, entre 2021 y 2022 este indicador creció de 66.5 a 66.8 por ciento, de acuerdo con cifras de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) del INEGI, con una tendencia que no ha cambiado desde la pandemia de la COVID-19. Tanto el gobierno estatal como el federal han puesto especial interés en el campo para subsanar una parte importante de esta problemática, con la meta de llevar a la formalidad al menos a 75 mil trabajadores de la industria aguacatera y más de 300 mil del sector primario en general. La problemática se toma no sólo para dignificar el trabajo, sino de cumplir con una serie de requisitos impuestos por el T-MEC para las exportaciones. Otro punto que atenderán este año es la inclusión de personas de sectores vulnerables en el mercado formal mediante un programa de nombre Abriendo Espacios. El ejercicio del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (con corte al cuarto trimestre de 2022) revela que, si bien el incremento de la tasa de formalidad ha sido de apenas tres décimas en el último se mantiene desde finales de 2020, cuando la tasa era de 66.0 por ciento. Estudios no garantizan empleo La ENOE estima que en Michoacán la población ocupada se compone de 2 millones 208 mil 839 personas, de las cuales un millón 476 mil 665 se desempeñan en la economía informal. Esto deja poco más de 732 mil trabajadores en el sector formal, de los cuales 476 mil puestos de trabajo se encuentran debidamente afiliados al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), según información de la misma institución, por lo que el resto se encontraría dentro de algún otro esquema de seguridad social, como el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE). En cuanto a población desocupada, la ENOE muestra una reducción del 2.5 al 1.6 por ciento de la Población Económicamente Activa, si bien un dato a tomar en cuenta es que de los 37 mil 500 michoacanos desempleados que calcula el INEGI, el 46 por ciento corresponde a personas que culminaron sus estudios de nivel medio superior e incluso varios con grado universitario y posgrados. El 11.4 por ciento de los desocupados no culminaron la primaria; el 8.2 por ciento terminó sus estudios de primaria, en tanto que el 34.5 por ciento cuenta con la secundaria terminada. En el cruce de datos de las afiliaciones al IMSS, los datos de empleo del INEGI y las cifras de acomodación del programa Jóvenes Construyendo el Futuro se nota también que el impacto habría sido mínimo y muy por debajo de las metas prospectadas de colocar al menos a la mitad de los jóvenes becarios. Abriendo Espacios Un sector que en particular también está recibiendo atención de la autoridad estatal es el de población vulnerable, particularmente la inclusión de personas con discapacidad, adultos mayores y víctimas en el mercado laboral. Sobre el tema, detalló Sofía Beltrán Pacheco, directora de Mejora Regulatoria de la Secretaría de Desarrollo Económico (Sedeco) de Michoacán, que para el presente año se tiene la meta de poder apoyar en la colocación de 2 mil 225 buscadores de empleo con esta problemática, principalmente mediante la realización de Ferias del Empleo. El esfuerzo, que se realiza de la mano del Servicio Nacional de Empleo (SNE), “parte de una nueva estrategia federal denominada Abriendo Espacios, la cual promueve un enfoque de inclusión laboral”, expuso la funcionaria. “Mediante bolsa de trabajo se atiende a quienes enfrentan mayores barreras de acceso al empleo, tales como personas con discapacidad, adultos mayores y víctimas de delito o de violación de derechos humanos”, También, dijo, a personas en contexto de movilidad, que incluye a las y los mexicanos repatriados o en situación de desplazamiento forzado interno, personas migrantes extranjeras solicitantes o que hayan obtenido la condición de refugiado, asilo político o protección complementaria. “La estrategia opera a través de la identificación de perfiles integrales y orientación ocupacional, mediante la aplicación de instrumentos de evaluación especializados, entre los que destaca el Sistema de Muestras de Trabajo Valpar, cuyos resultados permiten orientar a las personas hacia su mejor opción y realizar actividades que faciliten su empleabilidad”, explicó Beltrán Pacheco.