EFE / La Voz de Michoacán Lima. El expresidente peruano Alberto Fujimori (1990-2000) reapareció este jueves con una cánula nasal de oxígeno durante su participación, de manera virtual, en la vista de un habeas corpus que solicita que se anule su sentencia a 25 años de cárcel por el secuestro de un periodista en 1992. Con voz débil, aunque clara, Fujimori ofreció los argumentos "de hecho" solicitados por la Primera Sala Constitucional de la Corte de Lima, presidida por el juez Oswaldo Ordóñez, sobre su pedido de anulación de la condena que se le impuso por los secuestros del periodista Gustavo Gorriti y del empresario Samuel Dyer, tras el autogolpe que dio el 5 de abril de 1992. Esta sentencia se emitió en 2009, además, por el asesinato de 25 personas en las masacres de Barrios Altos y La Cantuta, cometidos por el grupo militar encubierto Colina en 1991 y 1992, respectivamente. Sobre Gorriti y Dyer, Fujimori aseguró que "en ningún momento se dio la orden para detener a estos dos señores" y que él se enteró del caso "el 7 u 8 de abril" durante una reunión con la prensa extranjera donde, según dijo, Gorriti narró los hechos y reclamó "la computadora que se le había incautado en esa detención". Tras decir que ordenó la devolución de la computadora, el exgobernante señaló que "en ningún momento" Gorriti "fue maltratado". "Estuvo una madrugada en los servicios de inteligencia del Ejército y luego pasó a la dirección de la Policía", sostuvo antes de agregar que algo similar sucedió en el caso de Dyer, que también fue llevado al servicio de inteligencia y "liberado a los pocos días y sin mayor trámite". Al término de su intervención, el abogado de Fujimori recordó que el exgobernante tiene 84 años y sufre de "comorbilidades (trastornos o enfermedades) que se intensifican en el tiempo". Agregó que solicitan al tribunal que "se permita que una persona que ha sido sentenciada de una manera injusta y equivocada pueda regresar a su hogar, pueda pasar los últimos días de su vida con su familia, como corresponde". En respuesta, la Fiscalía recordó que en febrero pasado ya se rechazó un recurso similar, por lo que pidió que se declare improcedente este pedido. Tras escuchar los alegatos, el juez Ordoñez informó que se dejaba al voto de los miembros del tribunal la decisión sobre el recurso, que se informará en una fecha que no precisó. El pasado 1 de febrero, el Noveno Juzgado Constitucional de Lima declaró improcedente un habeas corpus que pedía que se anulen las sentencias por Barrios Altos y La Cantuta, así como por los secuestros de Gorriti y de Dyer.