Tarifa de apps de envíos de comida a domicilio impacta en costos de restaurantes

Los altos costos de estas aplicaciones de entrega a domicilio son una realidad que afecta a los negocios, especialmente a los pequeños y medianos.

Foto: Especial

Maricruz Rios / La Voz de Michoacán

Morelia, Michoacán. Pese a llegar a nuevos clientes y ampliar mercado, el alto costo que todavía representan las aplicaciones móviles de entrega de comida, como Didi, Rappi y Uber Eats, sigue siendo un reto para los restauranteros en Michoacán.

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Al respecto, Gerardo Salvador Bustos Pineda, presidente de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y de Alimentos Condimentados (Canirac), señaló en entrevista con La Voz de Michoacán que, aunque la ruta de los envíos de alimentos preparados vía plataformas digitales ha significado una revolución y un respiro para los restaurantes en medio de tiempos complejos, las tarifas aún son altas.

Los altos costos de estas aplicaciones de entrega a domicilio son una realidad que afecta a los negocios, especialmente a los pequeños y medianos, quienes no cuentan con el mismo poder de negociación que las grandes cadenas. A pesar de los beneficios que ofrecen estos servicios, como llegar a nuevos clientes y aumentar sus ventas, los restauranteros han tenido que buscar formas de reducir estos costos para poder mantenerse a flote y continuar operando en un mercado cada vez más competitivo.

“Sigue habiendo un costo muy alto por las aplicaciones, realmente sí es costoso tenerlas, pero se valora que es un nuevo canal de ventas que no teníamos”, señaló el líder empresarial, quien destacó que sin duda estas plataformas fueron de vital importancia durante la contingencia sanitaria por la enfermedad del coronavirus (COVID-19) para poder mantener operativos los negocios en medio de las medidas de aislamiento físico.

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Recordó que la pandemia de COVID-19 fue una prueba difícil que incluso condicionó el cierre temporal o definitivo de varios restaurantes, bares y cafés, pero encontraron en las aplicaciones de reparto de comida una forma de mantener sus negocios a flote.

El presidente de la Canirac reconoció que en buena medida la tarifa del servicio se traslada al comensal, y en muchas ocasiones es más económico y rentable que el restaurante tenga su propio servicio de entrega a domicilio, aunque no todos pueden tener una operatividad de este tipo.


Didi, Uber y Rappi, más caras

En un análisis de menús de restaurantes, esta casa editorial encontró que en promedio los platillos tienen un costo entre 15 y 20 por ciento más alto al ordenarse de las aplicaciones, lo que demuestra que el pedir vía Rappi, Uber Eats o Didi sí impacta directamente en el precio final que se le cobra al cliente.

Por ejemplo, un negocio de ramen cuyos platillos básicos rondan entre 139 y 159 pesos se le suman alrededor de 30 pesos cuando se revisa el menú en Didi Food. Otro caso similar sucede con las taquerías de la Avenida Universidad, que elevan entre cuatro y cinco pesos el precio por taco cuando el pedido es mediante aplicación. Lo mismo sucede con negocios en la zona Centro y Bulevar García de León, en donde los costos en la mayoría de los casos (salvo las cadenas grandes) son más elevados mediante las apps.

No obstante, en medio de este contexto, pondera Gerardo Bustos que los restaurantes vienen saliendo de una crisis y los pronósticos son buenos para la Semana Santa, en donde anticipan un incremento de la derrama económica por el orden del 20 por ciento.

Justamente, bajo los objetivos de apuntalar la promoción de los negocios del rubro, aumentar el número de afiliados y establecer delegaciones regionales al interior de la entidad, Gerardo Salvador Bustos Pineda asumió la presidencia estatal de la Canirac para el periodo 2023-2024. La prioridad, dijo, será continuar una línea de trabajo que permita a los negocios recuperarse por completo, estabilizarse y seguir creciendo, así como hacer crecer el número de agremiados. "Tenemos muchas ventajas al pertenecer a la Canirac: convenios con instituciones educativas, con proveedores, sobre todo de capacitación a precios preferenciales”, afirmó el presidente de la delegación michoacana de la cámara.

El nuevo presidente de la Canirac, Gerardo Bustos, reconoció que los restaurantes han vivido tiempos difíciles durante los últimos años, y que la prioridad de su Consejo Directivo es ayudar a los negocios a recuperarse por completo, estabilizarse y seguir creciendo. Una de las estrategias es hacer crecer el número de afiliados, establecer delegaciones regionales y promover la cocina tradicional de Michoacán, manteniendo el valor intrínseco turístico que tiene el estado gracias a su gastronomía.