EFE / La Voz de Michoacán Atenas. El número de muertos confirmados por el naufragio de un pesquero con cientos de inmigrantes a bordo ante las costas griegas aumentó este lunes a 80 tras ser recuperados otros dos cadáveres de la zona del siniestro, señaló a EFE una portavoz de la Guardia Costera. Los cuerpos sin vida están siendo trasladados al puerto de Kalamata, al suroeste de Atenas, mientras que las operaciones de búsqueda continúan al suroeste de la península del Peloponeso, donde se produjo la tragedia el pasado miércoles. Ese mismo día fueron rescatadas con vida 104 personas y desde entonces no se ha podido localizar a ningún otro superviviente, por lo que ya no hay esperanza de encontrar a alguien con vida. La embarcación había partido desde Egipto, hizo una escala en el este de Libia, donde embarcaron los migrantes, y después siguió hacia el norte, rumbo a Italia. De acuerdo a los testimonios de algunos rescatados, unas 700 personas viajaban en la abarrotada embarcación, entre ellas muchas mujeres y niños, lo que significa que el hundimiento del barco podría ser una de las mayores tragedias migratorias en el Mediterráneo. Las autoridades han detenido por supuesto tráfico de personas a nueve hombres de nacionalidad egipcia que estaban entre los rescatados. Tienen previsto prestar este martes declaración ante la Justicia y podrían enfrentar cargos de tráfico ilícito de inmigrantes, causar un naufragio y poner vidas en peligro. Mientras, las autoridades en Pakistán arrestaron este lunes a un presunto traficante de personas vinculado con este naufragio, informó la Agencia Federal de Investigación de este país. La víspera la prensa griega publicó el protocolo del capitán de la patrullera de la Guardia Costera que acudió a rescatar el pesquero y que señala que la nave rechazó la ayuda que se le ofreció a pesar de su precaria situación. Según el diario Kathimerini, el capitán -del que no se revela su nombre- sostiene que los guardacostas trataron de forma repetida de asistir a la embarcación con los inmigrantes. Algunos medios internacionales citan a supervivientes que afirman que la propia guardia costera habría causado el hundimiento al intentar remolcar el pesquero, algo que las autoridades griegas y el propio protocolo de la patrullera niegan.