Redacción / La Voz de Michoacán. Morelia, Michoacán. El periodista y escritor Héctor de Mauleón ha dado a conocer “datos apabullantes”, al dar a conocer que el crimen organizado en México se extiende a lo largo de 1.59 millones de kilómetros cuadrados, lo que equivale a 81% del territorio nacional, “en donde 108 millones de mexicanos viven en riesgo potencial”. En una nota publicada en El Universal, el también articulista especializado en crimen organizado señala que “las garras de los grupos criminales se han hecho presentes en el país por medio de ejecuciones, masacres, narcomantas, extorsiones, secuestros, videos amenazantes e, incluso, asesinatos de policías, políticos y funcionarios. Estos hechos han sido detectados en mil 488 de los 2 mil 471 municipios que hay en el país”. A decir del periodista, los grupos de la delincuencia organizada con más presencia en el país son el Cártel Jalisco Nueva Generación, liderado por Nemesio Oseguera, y el Cártel de Sinaloa, cuyo liderazgo comparten Ismael Zambada y Los Chapitos, hijos de Joaquín Guzmán Loera, entre otras células menores. El cártel de El Mencho opera en 28 estados; el sinaloense, en 24. Pero además, el Cártel del Golfo tiene presencia en 10 estados, el Cártel del Noreste, en 8; La Familia Michoacana opera en 7 entidades y Los Zetas, con todas sus escisiones y pugnas internas, actúa en 6. En menor rango están Los Templarios, que tienen presencia en estados; Los Chapitos por su cuenta tienen activos en 4, y organizaciones “menores”, como lo que queda de los Beltrán Leyva, el Cártel de Caborca (cuyo liderazgo se le atribuyó a Rafael Caro Quintero), Los Talibanes, Los Rojos, Los Salazar y Los Viagras actúan cada una en tres estados. Los datos anteriores se desprenden de una investigación que durante más de medio año realizó la firma AC Consultores mediante el análisis de datos del gobierno federal y las fiscalías estatales, así como la consulta de “fuentes abiertas” y la revisión de documentos hackeados a la Sedena por el colectivo Guacamaya. Todo ello generó un amplio estudio a cuyas conclusiones tuvo acceso El Universal, señala De Mauleón. El periodista ilustra el clima de narcoviolencia que azota al país señalando que en los primeros días del presente mes se registraron asesinatos y masacres “en lugares tan distantes entre sí como lo son Chiapas, Chihuahua, Guanajuato, Morelos, Tamaulipas, Michoacán, Oaxaca, Veracruz, Guerrero, Sonora, Zacatecas y Querétaro”. El saldo de esos hechos: “971 homicidios dolosos: un promedio de 80.9 diarios. Esos homicidios engrosan la cifra de más de 158 mil muertes violentas ocurridas a lo largo del sexenio”. Según el estudio de AC Consultores, en el país existen 175 organizaciones criminales: El Cártel Jalisco actúa en 427 municipios mexicanos. Los Zetas operan en 411.El Cártel de Sinaloa, en 293.La Familia Michoacana, en 103. El Cártel del Golfo, en 84.El Cártel del Noreste, en 63.Los Zetas Vieja Escuela, en 55.El Cártel de Juárez, en 30. Pero hay grupos más pequeños, con impacto regional, los cuales dominan entre 20 y 50 municipios: Los Chapitos, Los Salazar, Guerreros Unidos, Los Rojos y La Línea, así como organizaciones menos conocidas y citadas: Los Yglesias, El Cheturo, Los Chehuis, Los Coyunda, Los Reyes y Los Terán. Pero en el documento se consigna también el radio de influencia de cada grupo delictivo: el Cártel de Sinaloa domina 674 mil kilómetros cuadrados, el CJNG, 477 mil. El Cártel de Juárez, por su parte, mantiene presencia a lo largo de 153 mil kilómetros. Otro dato relevante es que las células del Cártel Jalisco operan en lugares cuya población abarca en su conjunto 55 millones de personas. El Cártel de Sinaloa lo hace en sitios donde habitan 36 millones. La Familia Michoacana, el Cártel del Golfo, La Unión Tepito y el Cártel de Tláhuac operan en centros donde conviven 47 millones de mexicanos. Sólo dos grupos operan en más de 20 estados. Del Cártel Jalisco no se reporta presencia en Sinaloa, Durango, Coahuila ni Campeche. En el resto del país hay actividad de sus células. Según el documento, el Cártel de Sinaloa tendría también presencia en casi todos los estados, a excepción de algunos como Tamaulipas, Michoacán, San Luis Potosí, Querétaro e Hidalgo. De las 175 organizaciones registradas, sólo 39 actúan en dos estados o más. Un total de 136 se mueven en sólo un estado de la República. Pero además existe un promedio de alrededor de 9.5 grupos criminales en cada estado de la República. La Ciudad de México es la excepción: se registran 216 por ciento más organizaciones que en el resto del país. “El estudio detecta la imparable actividad de 30 grupos delictivos en la capital de México. Los más grandes son La Unión Tepito, La Fuerza Anti Unión, el Cártel de Tláhuac y células de La Familia Michoacana”, señala De Mauleón. Pero operan también grupos locales como el de Juan Balta, Los Tanzanios, Los Canchola, Los Rodolfos, Ronda 88, Los Molina, El Maestrín, El Hércules y El ET. Según AC Consultores, en la capital del país también existe presencia de los cárteles de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación, así como de Guerreros Unidos, un grupo que hasta no hace mucho sólo tenía presencia en algunas regiones de Guerrero. Como dato relevante, el informe señala también la presencia de organizaciones de colombianos y venezolanos (muchos de ellos dedicados al gota a gota) cuya actividad ha sido ubicada en 23 por ciento del territorio de la Ciudad de México. Estos grupos constituyen un riesgo potencial para 8.6 millones de habitantes, sobre todo de las alcaldías de Gustavo A. Madero e Iztapalapa, las cuales registran la presencia de 13 grupos criminales, lo que las coloca en el mismo rango de Tepalcatepec (con 15 organizaciones) y Ciudad Juárez, Chihuahua (12 grupos), señala el reporte. En la lista de alcaldías del país con mayor presencia del crimen organizado estánlas Asunción Ixtlaltepec, Chahuites, Ciudad Ixtepec, El Espinal, Guevea de Humboldt, Ixpantepec Nieves, Juchitán de Zaragoza, Magdalena Tlacotepec y Reforma de Pineda, todas de Oaxaca, con nueve grupos cada una. En ese rango se encuentran Ecatepec, en el Estado de México, y Mexicali, en Baja California. Otros estados que superan la media nacional en cuanto a presencia de cárteles son Michoacán, donde se contabilizan 24 grupos; Sonora, donde actúan 19; Estado de México y Chihuahua, con 18 cada uno; Oaxaca, con 16; Guerrero e Hidalgo, con 14, respectivamente, así como Morelos y Puebla, con 11 grupos detectados en cada estado. En el estudio se concluye que la presencia arrasadora del crimen organizado en el país, medida en kilómetros cuadrados, corresponde a los cárteles Jalisco Nueva Generación y de Sinaloa, y que en 49% del territorio se han asentado grupos como el Cártel de Juárez, Los Zetas, Los Salazar, el Cártel del Noreste, el Cártel del Golfo, La Línea, Los Chapitos y Los Zetas Vieja Escuela. Al ser el de mayor presencia, el CJNG representa un riesgo social y económico para 43.5% de la población mexicana. Por su parte, el Cártel de Sinaloa pone en riesgo a 28.6 de los mexicanos. “Es la radiografía del avance del crimen organizado hasta 2023, el retrato de un país inmerso en una crisis de criminalidad sin precedente”, concluye Héctor de Mauleón.
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