Juan Bustos / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. La sección de jubilados del Sindicato de Trabajadores de la Universidad Michoacana (Stumich) ha expresado su preocupación debido a que más de 200 trabajadores se encuentran esperando la aprobación de sus jubilaciones, las cuales no han recibido autorización por parte de la autoridad universitaria, teniendo ya tiempos de espera de hasta cinco años. En vista de esta situación problemática, están solicitando establecer un diálogo directo con la rectora de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH), Yarabí Ávila González. Ramón Altamirano Gamiño, líder de la sección, ha señalado que el Stumich, el cual representa a 300 jubilados de la institución nicolaita, cuenta con una toma de nota que sigue vigente desde noviembre de 2022. El líder sindical ha mencionado que durante la administración anterior, encabezada por Raúl Cárdenas Navarro, no se autorizaron las jubilaciones para los trabajadores administrativos y manuales. Sin embargo, ponderó este tema sigue siendo un asunto que requiere más análisis. “El abogado general nos informó que este año no sería posible realizar los pagos correspondientes a las jubilaciones debido a que en la administración anterior no se consideró en el presupuesto actual el dinero destinado para estas jubilaciones. Esto es una noticia muy desalentadora para los compañeros que están esperando este pago, y además me parece que es una gran injusticia”, agregó. Este escenario contrasta con el de los afiliados al Sindicato de Profesores (SPUM), cuyas jubilaciones han sido aprobadas. Altamirano Gamiño ha sugerido que esta disparidad podría indicar cierta discriminación hacia los trabajadores, incluso insinuando la posibilidad de influencias políticas que pasan por alto las normativas correspondientes. “Nosotros sentimos que hemos sido tratados de manera discriminatoria, ya que durante las sesiones del Consejo Universitario se han aprobado paquetes de jubilaciones en años anteriores, pero solamente para el personal académico”, apuntó. Altamirano Gamiño ha mencionado que, de acuerdo con el Contrato Colectivo de Trabajo y la Ley Orgánica, los trabajadores administrativos tienen el derecho de jubilarse después de 25 años de servicio, y a recibir el pago correspondiente a su prima por jubilación. “Los compañeros que están en etapas de prejubilación, algunos de los cuales ya tienen 5 o 6 años en esta etapa, lo cual es una violación al Contrato Colectivo de Trabajo, ya que este señala que cuando un trabajador cumple cinco años de servicio en la universidad tiene el derecho de solicitar, tres meses antes de cumplir esa etapa, un permiso prejubilatorio”, dijo. No obstante, debido a la crisis financiera de la universidad, han experimentado retrasos en los pagos. Afirmó que la rectora Yarabí Ávila no ha dado respuesta a sus solicitudes y llamó a la sensibilización y apoyo por parte de las autoridades. La situación ha afectado a más de 100 trabajadores administrativos en etapa prejubilatoria. A pesar de haber renovado un convenio con la administración pasada para liberar documentos y permitir el trámite de la pensión por cesantía ante el Seguro Social, la promesa de pago de jubilaciones no se ha cumplido, según ha detallado. El representante de los jubilados pidió respetuosamente a las autoridades que cumplan con sus compromisos y que consideren la importancia de una administración basada en valores humanistas. En caso de no encontrar una respuesta satisfactoria, los jubilados han anunciado que explorarán rutas legales, como demandas individuales, e incluso podrían involucrar a instancias de derechos humanos. Han resaltado la urgencia de resolver esta situación, dado que muchos jubilados enfrentan dificultades económicas y de salud. Altamirano Gamiño señala que el elevado número de jubilados se debe a una oleada de trabajadores que ingresaron masivamente a la universidad hace 30 o 25 años, en torno a los mismos años. “En resumen, todos estos compañeros ya han cumplido su etapa y están en esta situación. Algunos han encontrado nuevos empleos. Por otro lado, algunos han aprovechado su situación de jubilados”, concluyó. El líder de los jubilados recalca que son 200 trabajadores administrativos afectados por esta situación. A pesar de que la Autoridad Universitaria ha mencionado que están trabajando en solucionar este retraso desde 2019, planificando pagos en paquetes, la situación no ha avanzado.
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