Consejo Supremo Indígena pide respeto a las tradiciones de Noche de Muertos

Las comunidades se quejan de falta de concientización por parte del gobierno; llaman a apoyar a los pueblos con la compra de sus productos sin regatear

Foto: Víctor Ramírez

Juan Bustos / La Voz de Michoacán

Morelia, Michoacán. El Consejo Supremo Indígena de Michoacán (CSIM) se pronunció sobre la celebración del Día de las Ánimas, como se conoce en las comunidades originarias, y el respeto que solicitan a los visitantes, tanto hacia la tradición como hacia el apoyo al consumo de productos locales.

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En una rueda de prensa, Armando Bartolo de Jesús, coordinador general del consejo de administración de Jarácuaro, y Pavel Guzmán Macario, vocero del CSIM, expresaron la necesidad de que en la promoción realizada por los gobiernos en torno a esta celebración se destaque la importancia del respeto a las culturas originarias y las tradiciones en estas fechas tan relevantes para los pueblos.

Los voceros mencionaron el caso de la comunidad de Jarácuaro, que, al igual que muchas otras en Michoacán, celebra el Día de Muertos o de las Ánimas con una profunda tradición que involucra visitas a los panteones y la exhibición de altares en la iglesia local.

Guzmán Macario señaló que esta festividad es relevante no solo desde un punto de vista cultural y espiritual, sino también desde una perspectiva económica, ya que genera una derrama económica significativa para la comunidad.

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El llamado del CSIM se basa en la necesidad de preservar y respetar estas tradiciones. Según Bartolo de Jesús, las campañas publicitarias del gobierno no han enfatizado suficientemente el respeto a la cultura, los lugares sagrados y la historia de los pueblos indígenas.

A pesar de que los turistas contribuyen económicamente a las comunidades, a menudo no respetan los panteones ni los lugares sagrados, lo que afecta negativamente la experiencia de la festividad.

El vocero enfatizó que el CSIM invita a los visitantes a actuar de manera respetuosa y ordenada, sin la influencia de bebidas embriagantes en los lugares sagrados. Se resalta que todos son bienvenidos, pero se insiste en que se respete la intimidad de la ceremonia y se mantenga el orden.

Armando Bartolo de Jesús también mencionó la presencia de un operativo de seguridad implementado por el gobierno del estado con más de 500 elementos. Sin embargo, la comunidad solicita que este operativo sea permanente en lugar de itinerante, con la esperanza de garantizar la seguridad y el respeto en todo momento.

En cuanto a la cuestión de recursos, Bartolo de Jesús explicó que el presupuesto asignado a la comunidad es limitado, y que la comunidad invierte significativamente en la promoción y preservación de sus tradiciones. Se destacó la importancia de las redes sociales y la radio local como herramientas de promoción.

En cuanto a la seguridad, se aclaró que, aunque la comunidad no ha enfrentado incidentes de violencia en el pasado, es importante contar con la seguridad necesaria para evitar problemas.

Los representantes enfatizaron la importancia de preservar las tradiciones del Día de Muertos en Michoacán y garantizar que los visitantes respeten las costumbres y lugares sagrados de las comunidades indígenas. Además, se destacó la necesidad de recursos para mantener y promover estas festividades a lo largo del año, no solo durante la temporada alta de turismo.

Celebración de siglos

Cabe recordar que el Día de Muertos, celebrado los días 1 y 2 de noviembre en México, es una festividad profundamente arraigada en la cultura del país que combina elementos prehispánicos y religiosos. Esta celebración única es un momento en el que las familias se reúnen para honrar y recordar a sus seres queridos que han fallecido y que en el caso de Michoacán tiene una de sus manifestaciones más representativas.

Sin embargo, una de las quejas recurrentes de los últimos años ha sido la falta de respeto de los turistas y las mismas autoridades a estas festividades que, si bien representan un ingreso económico relevante, son también muy celosos de guardar las costumbres. Entre las quejas se encuentra el consumo desmedido de alcohol, la intromisión en lugares “privados”, así como la falta de apoyo a los pueblos originarios.