Angélica Ayala / La Voz de Michoacán Pátzcuaro, Michoacán. La fiesta principal de Pátzcuaro en honor a la Virgen María de la Salud ha sido anunciada por las mojigangas, esos muñecos de gran tamaño que entraron bailando a la basílica donde se encuentra la imagen, patrona de la Arquidiócesis de Morelia y de este pueblo mágico. A un mes de realizar la celebración, los “monos” bailarán por las calles todos los domingos hasta que sea el 8 de diciembre, día central de la festividad. En la misa del mediodía, las mojigangas llegaron acompañadas del grupo de música, que con sus acordes hizo que los muñecos bailaran para entrar a la iglesia de la Virgen de Tata Vasco. Las figuras más grandes son cargadas por jóvenes, las de menor tamaño incluso por niños; la tortuga, la guarecita, el moro, los gemelos y la dama bailaron al son de una pirekua michoacana, hasta llegar al altar. Allí, a los pies de la imagen, bailaron mientras los feligreses capturaban el momento con sus celulares. El rector de la Basílica, Leopoldo Sánchez, recibió a las mojigangas y anunció la bendición. “Es una antiquísima tradición de Pátzcuaro; precisamente salían un mes antes de la fiesta de la Virgen para anunciar que se acercaba la fiesta de nuestra madre santísima. Felicitamos a la familia Tena, que ha conservado esta tradición para el disfrute de todos nosotros”, afirmó. A continuación, bendijo las figuras y a quienes las bailan con una oración y luego las roció con agua bendita. “Se van con la bendición de Dios y de nuestra madre Santísima para ir por las calles, con la música anunciando la fiesta de la Virgen de la Salud”. De acuerdo con la información proporcionada por el recinto mariano, “como cada año salen a las calles las tradicionales mojigangas, muñecos gigantes que anuncian las Festividades en honor a la Virgen de la Salud el 8 de diciembre. Estos personajes, que desde hace muchos años salen un mes antes a pasear y bailar por las calles de la ciudad, acompañados por música de cuerdas, causan un ambiente de alegría y festividad a los pobladores de Pátzcuaro y expectación a los visitantes”. Las mojigangas son figuras monumentales de cartón conducidas por personas que bailan al compás de sones abajeños. Estas figuras datan del siglo XVI y se presentan como anticipo a las fiestas del ocho de diciembre en honor de la Purísima Concepción, Virgen de la Salud. Según los datos proporcionados, “las mojigangas fueron traídas a México por los sacerdotes católicos y se fueron desarrollando más dentro del concepto de lo festivo y carnavalesco. Hoy en día, son personajes típicos de las fiestas populares en México, los cuales bailan al ritmo de la tambora con singulares movimientos; se podría decir que son el alma de la fiesta, ya que, por su tamaño, fisonomía y características, contagian a la gente de emoción, alegría y ganas de bailar”. Como parte del anuncio de la fiesta patronal, también se realizan las reseñas, que son el tradicional repique de campanas de la Basílica. “Anuncian a la Ciudad de Pátzcuaro la cercanía de las festividades en honor a María Inmaculada de la Salud el día ocho de diciembre. Dichas reseñas inician justo un mes antes de la fiesta, el día ocho de noviembre, y continúan durante este tiempo en el día que caerá la fiesta, siendo este año el viernes”. Este repique se caracteriza por su duración, un tiempo de 20 a 30 minutos, además de ser iniciado por la esquila San Antonio de Padua y la campana mayor, a las que posteriormente se unen las demás campanas. De esta manera, las mojigangas iniciaron su recorrido por las calles de Pátzcuaro, no solo del centro histórico, sino también en las colonias más cercanas al primer cuadro de la ciudad; bailan y van recolectando dinero, para el pago de la música o de quienes las bailan, ya que es un trabajo de mucho esfuerzo y coordinación.
La Voz de Michoacán
