Agencias / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. El ultraderechista Javier Milei, presidente electo de Argentina, iniciaría un proceso de dolarización, e incluso llamó a inversores a dejar de usa el peso local. Pero hay quienes se preguntan qué es, para qué se usa y cuáles son los retos de esta conversión económica fuera de Estados Unidos. Según el documento “Fundamentos de la dolarización”, de la Universidad Johns Hopkins, el proceso puede ser extraoficial, cuando civiles prefieren comerciar con dólares, u oficial, cuando el gobierno adopta la moneda como de curso legal exclusivo o predominante; en ambos casos, para protegerse de la inflación. También existe una dolarización semioficial, presente entre los inversores y grandes empresas de países como Argentina, Bolivia, México, Perú. ¿En qué consiste? Esto dice la Universidad Johns Hopkins: “Sucede cuando el dólar es moneda extranjera de curso legal, capaz de dominar depósitos bancarios, pero secundaria con respecto al pago de salarios, impuestos y gastos diarios. Países semidolarizados mantienen su banco central y poseen cierta flexibilidad para conducir su política monetaria”. Retos de la dolarización Según el Fondo Monetario Internacional (FMI), el expresidente argentino Carlos Menem (1989-1999) propuso la dolarización como solución definitiva para la larga historia de dificultades de política monetaria y cambiaria. Sin embargo, existen retos que no se pueden ignorar, y el Banco Central de Reserva del Perú explicó una lista: El uso de dos monedas en un país implica una serie de costos. En el largo plazo, reduce la tasa de crecimiento de las economías. Empresas y familias se endeudan en dólares pero generan ingresos en moneda local. Escasez de denominaciones pequeñas de dólares hacen costoso su uso en transacciones menores. Países con altos niveles de dolarización sufren más pérdidas de ingresos durante episodios de crisis. Crisis generan dolarización En América, países como Ecuador (con manifestaciones sociales recurrentes por motivos económicos), El Salvador (con una profunda crisis de desigualdad económica) y Panamá adoptaron oficialmente la dolarización, cada uno desde un contexto que permite distintas ventajas y retos. Para que te des una idea de la devaluada moneda argentina, toma en cuenta que el valor del dólar en el mercado oficial, controlado por el gobierno, se mantiene en alrededor de 365 pesos; en el mercado informal, cotiza en alrededor de 945 pesos, una brecha de más de 160 por ciento.