Redacción / La Voz de Michoacán Ciudad de México. Este miércoles, la Asociación Mexicana de Empresas de Seguridad Privada e Industria Satelital (Amesis) alertó sobre el preocupante aumento del 27% en los robos al transporte de mercancías en México durante el año 2023. Esta tendencia, considerada un "año negro" para el sector, está generando un impacto significativo en la economía, contribuyendo al alza de precios en diversos productos. Según datos recopilados por cámaras y asociaciones de autotransporte, seguridad y rastreo satelital, se registraron un total de 9 mil 181 incidentes el año pasado, de los cuales 7 mil 862 involucraron violencia. Mayo se destacó como el mes más violento, con 732 víctimas. Esto implica un promedio de 56 robos de carga por día. El uso de tecnología de interferencia en las comunicaciones, conocida como “jammer”, fue evidente en el 82% de los casos. Estas pérdidas financieras no solo afectan a las empresas de transporte y aseguradoras, sino también a los trabajadores autónomos del sector, incrementando los costos de traslado y, en última instancia, el precio para el consumidor final, según advirtió el presidente de Amesis, Ricardo Bustamante. Las zonas de mayor riesgo, identificadas por la Amesis, se encuentran en la región central del país. Según datos oficiales del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, el Estado de México lidera la lista de entidades con mayor número de incidencias, registrando 4,214 casos. Le siguen Puebla (2,589), Michoacán (687), San Luis Potosí (363), Jalisco (246), Oaxaca (214) y Ciudad de México (78). Ricardo Bustamante destacó que el 70% de los robos registrados en 2023 ocurrieron en aproximadamente el 9% del territorio nacional, concentrándose principalmente en la región centro del país debido a la conectividad carretera. El presidente de Amesis informó que, del total de hurtos en carretera, se registraron 577 robos entre sus afiliados en 2023, cifra superior a los 454 de 2022. Alertó además que el robo de mercancías en tránsito se ha convertido en una nueva fuente de financiamiento para organizaciones criminales. En cuanto a las categorías más afectadas, los abarrotes lideran con un 31%, seguidos por el acero (27%), calzado (15%), perecederos (3%), medicamentos (2%), químicos (2%) y mercancías diversas (20%). El presidente de Amesis concluyó advirtiendo que estas cargas, debido a su demanda y facilidad para ser colocadas en el mercado negro, se han vuelto objetivos prioritarios para los criminales.