Angélica Ayala / La Voz de Michoacán Charapan, Mich.- El Fuego Abuelo (Tata Ch’upiri) ha llegado a la comunidad indígena de Ocumicho, donde se apagarán sus llamas y se le agradecerá por todo el año que estuvo encendido. Desde el pasado lunes los cargueros y pobladores de varias comunidades purépechas iniciaron la caminata desde Erongarícuaro para llegar a la sede de este año. Hoy a medianoche la encenderán el Fuego Nuevo (Kurhikuaeri K'uinchekua), una celebración que involucra a las cuatro regiones purépechas: Lacustre, Cañada de los Once Pueblos, Ciénega de Zacapu y Meseta Purépecha. Durante tres días, el fuego abuelo fue resguardado y cuidado por hombres, mujeres, niños, niñas y jóvenes en la caminata por terracería, carreteras y caminos rurales. En cada poblado indígena que visitaron fueron recibidos con algarabía portando la bandera purépecha, incienso y el grito de “Juchari Uinapekua” (Nuestra Fuerza). El sonido del caracol de mar, el cual emiten al soplarle, y los bastones de mando, todos preservando esta tradición milenaria rescatada hace cuatro décadas. Entre las comunidades por las que pasó el fuego abuelo se encuentran San Francisco Pichátaro, San Isidro, Sevina, Nahuatzen, Cherán, Inhuarán, entre otras. Los pobladores los recibieron con alojamiento y alimentos sin importar el cansancio de la caminata. La alegría de los pueblos purépechas y la música invitaban a todos al festejo por tener a Tata Ch’upiri en su comunidad. La creencia es que por donde pasa el fuego abuelo, purifica los caminos, carreteras y poblados a los que llega. Este primero de febrero, justo cuando la constelación de Orión está a la mitad de su trayecto, se enciende el Fuego Nuevo. La hoguera arde en lo alto de la pirámide, marcando el inicio del nuevo año purépecha y del ciclo agrícola. Erongarícuaro fue la sede del 2023, desde donde trasladaron el Fuego Abuelo caminando hasta llegar a Ocumicho. El ritual está dedicado al dios del fuego Kuricaveri o Kurhikuaeri. En purépecha, la festividad del Fuego Nuevo es Kurhikuaeri K'uinchekua, que enmarca la cosmovisión de los pueblos indígenas de Michoacán. En un ambiente de hermandad, realizan ritos privados donde solamente participan los originarios. La ceremonia de la madrugada, cuando dan la bienvenida al dios Sol, es especialmente significativa. Esperan el amanecer para realizar su ritual con copal y el saludo a los cuatro puntos cardinales y a los cuatro elementos de la tierra. Este viernes, a partir de las 9:00 de la mañana inician las actividades con un evento cultural. A la par estarán realizando las las mesas de registro para las solicitudes de las comunidades que pretendan ser la próxima sede del año 2025. A las 10:00 de la mañana, se llevará a cabo en la plaza principal el saludo a la bandera purépecha, para continuar con el juego de pelota encendida Uarukua Chanakua. A las 12:00 horas se realizará el ritual del mediodía en la pirámide que se ubicará en la plaza principal, seguido de una actividad ancestral que es el trueque. A las 2:00 de la tarde se servirá la comida, otorgada a todas las personas que acuden a la ceremonia, principalmente a las provenientes de las comunidades purépechas. A las 3:00 de la tarde se realizará un recorrido por las principales calles de la ciudad. Continuarán los festejos con un evento cultural hasta que llegue la hora de iniciar con la ceremonia del Fuego Nuevo purépecha. Comúnmente se realiza a la medianoche, y ya sea antes o después se dará a conocer la comunidad que será la sede del siguiente año. Durante este 2024, el fuego estará encendido en Ocumicho, donde se moldea el diablo a través de las figuras de barro, principal actividad artesanal del poblado en sus atractivas figuras conocidas como “diablitos de Ocumicho”.