Redacción / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. Esta mañana, cientos de personas se dieron cita en distintas parroquias de Morelia para bendecir a sus imágenes del Niño Dios, como parte de la tradición de este día. El Día de la Candelaria en México tiene sus raíces en una celebración religiosa con origen en las Islas Canarias de España, donde anualmente se conmemora a la Virgen de la Candelaria 40 días después de la Navidad. Esta festividad, que combina influencias de diversas ideologías religiosas como la judía, católica y prehispánica, ha evolucionado a lo largo del tiempo, adoptando tradiciones como la Rosca de Reyes y la veneración del "Niño Dios". El origen de este día se remonta a la presentación del niño Jesús en el templo de Jerusalén y la purificación de su madre, marcando así una tradición judía introducida por el papa Gelasio en el año 946. Según antropólogos, la Virgen asistía a la Iglesia 40 días después del parto para purificarse y agradecer a Dios. Con el tiempo, esta práctica evolucionó, sustituyendo la ofrenda de palomas por "candelas", lo que dio origen al nombre "Día de la Candelaria". En México, el 2 de febrero celebramos esta tradición con la Rosca de Reyes, donde la figura del "Niño Dios" aparece en algunos trozos de pan. Aquel a quien le toca el "Niño" tiene la responsabilidad de hacer tamales, siguiendo la creencia del calendario azteca de que estos deberían estar hechos con maíz, considerado el fruto de la bendición de los alimentos de Dios. Los fieles católicos también participan en la celebración asistiendo a misa y vistiendo a sus figuras de "Niño Dios" con elegantes trajes blancos. La bendición de estas figuras marca un momento de alegría y cuidado para toda la familia, continuando una tradición arraigada en el país. Fotos de Samuel Herrera Jr. Además, el Día de la Candelaria está lleno de curiosidades que arrojan luz sobre lo arraigada que está esta festividad en la cultura mexicana: La tradición de la Candelaria se despliega exactamente 40 días después del nacimiento de Jesús, marcando el fin del periodo navideño y dando inicio a esta celebración única. La Biblia alberga dos pasajes que ilustran esta festividad, desde la purificación de la Virgen María hasta el ritual de llevar velas y pichones al templo después de dar a luz. La festividad es una fusión cautivadora de tradiciones prehispánicas y católicas, en la que los mexicas, honrando a Tláloc y Chalchiuhtlicue, regalaban maíz y tamales. Además, se incorporan elementos de la fe hebrea, cristiana y ritos paganos de las Islas Canarias. Los frailes, en su labor de evangelización, fusionaron las festividades al considerar el fuego de las velas de la Virgen de la Candelaria y el fuego del Sol indígena al comenzar la temporada de siembra. La tradición de vestir a los niños Dios proviene de la época del virreinato, donde las monjas adoptaron la práctica de vestir a los niños para presentarlos en la Iglesia, siguiendo el ejemplo de la Virgen María. La conexión con la Fiesta de las Candelas de Tenerife, España, se forjó a partir del relato de la aparición de la Virgen María en el siglo XIV, añadiendo una dimensión internacional a la celebración. Los tamales, preparados desde tiempos prehispánicos como ofrendas a los dioses, siguen siendo elaborados con maíz, reflejando la bendición de los alimentos divinos. Varios mitos rodean la preparación de los tamales, como la creencia de que, si no se cocinan adecuadamente, es indicativo de que la persona que los hizo estaba triste o llorando. La festividad es conocida por diversos nombres, incluyendo la Presentación del Señor, la Purificación de María, la Fiesta de la Luz o la Fiesta de las Candelas, mostrando su riqueza semántica. Otra teoría con respecto al nombre "Candelaria" se relaciona con la presencia de luz, simbolizando dentro de la religión católica que Jesús es presentado como la luz del mundo, agregando un significado espiritual a la celebración. Hace miles de años, los mexicas llevaban a cabo la fiesta Atlcahualo, un periodo vinculado al inicio de la mejor temporada de siembra de maíz, donde rendían tributo a sus dioses Tláloc y Chachitlicuetl. Con la llegada de la evangelización y colonización a México, las tradiciones evolucionaron, dando forma al Día de la Candelaria tal como lo conocemos hoy. Además de su significado religioso, la Candelaria se relaciona con el día de la Marmota de Pensilvania, marcando la mitad del invierno y proporcionando pronósticos meteorológicos populares. En España y Francia, se celebran festividades relacionadas con crepes y osos, respectivamente, cada una con sus propias tradiciones y supersticiones.