Maricruz Rios / La Voz de Michoacán Mientras que en el país se gasta cada vez más para que las y los candidatos se promocionen durante las campañas electorales, la inversión en educación se estanca o va a la baja. Mexicanos Primero advierte que los partidos políticos y candidaturas independientes podrán usar 36.3% más recursos para sus campañas respecto a lo asignado durante la elección federal de 2018, y en tanto, el presupuesto que el Estado otorga a la educación ha caído 3.36 por ciento entre 2015 y 2024. En el marcado inicio de campañas federales, Erik Avilés Martínez, delegado de la asociación en Michoacán, resalta también la falta de propuestas reales y asequibles sobre el rubro educativo, de parte de la mayoría de perfiles que aspiran a un cargo de elección popular, tanto en el nivel federal como estatal y local. Entre las candidaturas y la falta de propuestas El presidente del capítulo estatal de Mexicanos Primero, fustigó también el que siendo un sector tan importante, y en donde deberían incluso privilegiarse proyectos transexenales, estén varios funcionarios inmiscuidos en el proceso de buscar dar el “brinco” a una candidatura y no ocupados en los temas que realmente conciernen a lo educativo. “Si no existe plena vivencia de los derechos educativos de los mexicanos, ni tampoco hay asomo de que su garantismo vaya a incrementarse, ni tampoco está garantizado el advenimiento de escenarios promisorios para ellos, resulta natural que sus actores clave estén en campaña”. Evidenció lo que está a la vista de todos: también, los funcionarios están en campaña. “Vemos cómo se ha redoblado su actividad en redes sociales, se ha incrementado la serie de comunicados que emiten día tras día, así como se han multiplicado los avisos de entrega de apoyos sociales, al filo de la normatividad aplicable en materia electoral”. Además, “muchos” de ellos están enlistados en la lista de aspirantes a cargos de elección popular o forman parte de las pirámides de élites que ingresarán o continuarán ocupando cargos públicos. Erik Avilés ponderó que a este paso las comunidades educativas, “estudiantes, padres de familia, maestros, activistas, sindicalistas, funcionarios y la clase política están siendo incrementalmente involucrados en el proceso político-electoral que alcanzará su clímax en la jornada de votación, que tendrá verificativo el 2 de junio próximo”. Ahí, dijo, es cuando se tomarán decisiones colectivas cruciales, las cuales podrían ser definitorias en el futuro de las generaciones jóvenes en la nación. “Hasta el momento, está demostrado que, de parte de los aspirantes, candidatos y partidos políticos no hay grandes propuestas para la campaña; por lo que, al respecto, salvo que suceda algo extraordinario, las expectativas son bajísimas para estos comicios”, reconoció Erik Avilés. De momento la mayoría de propuestas han sido, por parte del oficialismo, de una continuidad que no queda realmente claro que haya mejorado las condiciones de enseñanza y aprendizaje, en tanto que del lado opositor abogan por temas como el rescate de Escuelas de Tiempo Completo que, si bien pueden ayudar a ciertos sectores, no van más allá del escenario que se tenía previo a 2018. En cuanto a la efectividad gubernamental de los gabinetes educativos en los órdenes federal, estatal y municipal, así como la producción legislativa, Avilés Martínez valoró que “los indicadores exclaman por sí mismos la inmensa deuda histórica heredada de administraciones anteriores, la cual se ha acrecentado en las últimas fechas”. En su posición, esta problemática es preocupante, “inundando no solamente las dependencias educativas, sino que se amenazan áreas tan sensibles como los organismos autónomos vinculados con la política educativa, ya sea en su evaluación, su transparencia, su transversalidad o su mejora continua”. Presupuesto, sin incrementos reales Mexicanos Primero ha advertido que la gran diferencia en la dispersión del presupuesto en los últimos., entre el recurso que se va a las campañas y el que se aplica efectivamente en la política educativa, quiere decir que los estudiantes han recibido menos recursos en términos reales (tomando en cuenta la inflación), en comparación con 2015, año en el que se aprobó el presupuesto más alto para educación. Si bien el organismo señala que el beneficio de la democracia y las votaciones libres para los países y sus habitantes es indiscutible, “no todo lo que importa a las y los mexicanos tiene la misma respuesta del Estado” En el país, aunque la educación, que atiende a 24 millones 093 mil 801 estudiantes en educación básica y 5 millones 540 mil 108 alumnos en media superior, es un derecho habilitante y tiene la responsabilidad del futuro de millones de personas, “el aumento al presupuesto está estancado y no permite que las escuelas públicas cuenten con infraestructura y servicios básicos para que sus estudiantes puedan aprender en óptimas condiciones”. Los datos de los paquetes económicos federales demuestran que, por ejemplo, en la distribución del presupuesto en 2023, se destinó 82.1% a servicios personales, 0.3% a formación docente, 0.1% para evaluación, 0.7% en libros, 5.7% en becas, 0.7% en asesoría y acompañamiento, 6.5% en Infraestructura y 4% en gasto corriente y de operación. En visión de Mexicanos Primero, “se trata de un presupuesto paralizado y sin incremento impide que exista mayor inversión para resolver necesidades de infraestructura básica, como agua, luz y sanitarios; tecnología, como Internet y computadoras de uso pedagógico, y hasta formación continua de docentes, que son condiciones mínimas para que una o un estudiante pueda aprender en su escuela”. De acuerdo con los últimos datos proporcionados por la Comisión Nacional para la Mejora Continua de la Educación (Mejoredu) del ciclo escolar 2021-2022, 35.4% de las escuelas en nivel preescolar no contaban con servicios básicos completos (electricidad, agua potable, servicio de lavado de manos y sanitarios); 35.9% de las primarias, 32.9% de secundarias y 36.8% de los planteles en nivel medio superior tampoco tenían los servicios completos. En formación docente, el presupuesto otorgado para 2024 a cada maestra y maestro para su formación continua (para que se actualice y cuente con más y mejores herramientas para su desempeño en el aula) es de apenas de 96 pesos para todo el año. Lo mínimo necesario “Si el presupuesto educativo contemplara incrementos similares a los que se asignan a la partidocracia se podrían cubrir las necesidades básicas en escuela y se permitiría a cada estudiante contar con las condiciones indispensables para estar y aprender en su escuela”, agregó Erik Avilés. Expuso que en las circunstancias actuales y más de los discursos triunfalistas de grandes logros, “México aún está muy alejado de garantizar las condiciones más elementales para que todas las niñas, niños y jóvenes puedan estar, aprender y participar en las escuelas”. Insistió en que el presupuesto educativo debe contemplar incrementos sustanciales, como los que se dan para fortalecer a la democracia, no solamente para pagar las necesarias nóminas educativas, sino “para solventar todas las necesidades básicas en cada plantel y permitir a cada estudiante contar con los mínimos indispensables para estar y aprender en su escuela”, Mexicanos Primero explicó buscará que cada candidata y candidato tenga presente la importancia de la educación y que consideren que, para atender a las necesidades de las escuelas, se necesita un incremento en el presupuesto. “Les invitaremos a priorizar acciones para un cambio real en beneficio de millones de estudiantes que tienen derecho a ir y aprender en escuelas con infraestructura básica, tecnología y con docentes formados en cada aula”. Con país en donde todavía se está muy lejos de garantizar lo básico para que todas las niñas, niños y jóvenes no sólo se sientan seguros en sus escuelas, sino que aprendan en ellas, Erik Avilés, pidió colocar a la educación en campaña: “que nuestro voto sea por la conformación del gobierno educador que merecemos”.
La Voz de Michoacán
