Redacción / La Voz de Michoacán Ciudad de México. El abuso de bebidas alcohólicas preparadas puede provocar daños irreversibles en el corazón, riñón e hígado, ya que no aportan ningún nutrimento saludable y su consumo se ha popularizado, por lo que especialistas del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) hacen un llamado a la población sobre la importancia del autocuidado a través de la alimentación y evitar la ingesta de alcohol. En el marco del Día Nacional de la Nutrición, que se conmemora hoy 28 de mayo, la jefa de la Unidad de Capacitación de la Escuela de Dietética y Nutrición (EDN) del instituto alertó que el consumo de bebidas conocidas popularmente como “azulitos” y “gomichelas” ha aumentado, lo que contribuye significativamente al aumento de peso, así como desarrollar problemas de salud a largo plazo, como diabetes, ya que sólo una de estas preparaciones de un litro contiene aproximadamente 728 kilocalorías; en caso de beber dos, se cubre en promedio dos tercios del requerimiento diario, que es de dos mil a dos mil 500 calorías. De acuerdo con el Informe Financiero y Actuarial del ISSSTE, en 2022 se atendió a un millón 145 mil 180 pacientes de 20 años o más por diabetes mellitus, lo que representa la prevalencia de 11.2 por ciento, es decir, aumentó 1.4 puntos porcentuales en comparación con 2021. “Hay varias cuestiones que podemos tomar en cuenta para revaluar su consumo, una de las principales es el contenido que tiene de azúcar y calorías vacías. Una sola ‘gomichela’ puede contener tanta azúcar como varias bebidas carbonatadas, refrescos; es decir, que un exceso no nos va a aportar los nutrimentos que necesitamos para cuidarnos como las proteínas y/o grasas”. Además, la especialista explicó que la mayoría de estas bebidas se preparan con líquidos energizantes, los cuales activan al sistema nervioso para aportar energía, mientras que el alcohol lo inhibe; al combinarlos se genera un choque en el organismo que, con el tiempo, pueden provocar problemas cardiovasculares y representa un riesgo a la salud. Cuando uno come de manera sana, dijo, previene riesgos de desarrollar alguna enfermedad como diabetes, hipertensión, problemas renales, entre otros que afectan a la población mexicana. “Una buena alimentación ayuda a procurar nuestra salud. Es importante consumir alimentos ricos en vitaminas, minerales; que sean naturales, evitar lo procesado o industrializado para no enfermarse y sí llevar una excelente calidad de vida.” Ante las altas temperaturas, es común que las personas busquen consumir bebidas alcohólicas refrescantes; sin embargo, existen alternativas sin alcohol, con menos azúcar, menos calorías, sin ingredientes industrializados, por lo que es importante acudir con un especialista en nutrición, quien puede orientar y apoyar a llevar una sana alimentación de acuerdo con nuestro organismo, concluyó.