En este Día del Padre, miles de migrantes michoacanos celebran desde la distancia 

Los padres de familia suelen concebir sus funciones paternas como difíciles por el sacrificio en la convivencia diaria que la migración implica.

Foto: EFE/Etienne Laurent.

Redacción / La Voz de Michoacán

Morelia, Michoacán. En el marco de este Día del Padre, miles de padres de Michoacán se encuentran viviendo en Estados Unidos para proveer a sus familias.

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Alrededor de 50 mil 770 personas migraron desde el estado de Michoacán hacia Estados Unidos en el periodo comprendido entre 2015 a 2020, Acorde con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). De estas, únicamente el 31.8% eran mujeres mientras que el 68.2% eran hombres.

Según un estudio para la revista Simbiosis realizado en el municipio de Puruándiro, la movilidad de los padres de familia impacta en los hijos y en las hijas en términos de comunicación emocional, ya que se manifiestan prácticas de control psicológico como la manipulación o el chantaje, especialmente en aquellos que son adolescentes.

Otra investigación para la revista Cimexus realizada en el municipio de Coeneo revela, con base en una serie de entrevistas, cómo los padres migrantes en calidad de jefes de familia, suelen mirar sus funciones paternas difíciles por el sacrificio en la convivencia diaria que la migración implica y que son necesarias para lograr la manutención de sus hijos e hijas.

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De igual manera, se destaca que los hijos e hijas que se quedan en la localidad, aunque se percatan del envío de remesas económicas por parte de su padre, consideran que tal acción no es suficiente para cubrir la totalidad del ejercicio de la función paterna que sus padres migrantes deben desarrollar.

Para ello, se cita el caso de Sara, una joven que percibe que su padre no posee la autoridad suficiente para regañarla dado que no habita en su misma localidad. “La verdad yo ya no sé qué es mejor. Si ver a mi papá o no. Por un lado, me da mucho gusto y me ilusiona mucho cuando nos avisa mi papá que va a venir. Mi mamá luego luego mata un pollo y hace mole, pero cuando llega mi papá, luego luego empieza a mandarnos a todos y no nos deja salir ni a la esquina y regaña mucho a mi mamá por todo. Y luego yo solita me pregunto “ora si que ese señor ¿qué se cree?, ¿porque quiere venir a mandar acá y a regañarnos si él nunca está con nosotros?”, expuso la joven.