EFE / La Voz de Michoacán Ciudad de México. La serie de cambios en la Constitución mexicana propuestos para modificar el Poder Judicial y desaparecer el organismo de transparencia, que socavarían la independencia judicial, la privacidad y la rendición de cuentas, deberían ser rechazados por los legisladores mexicanos en el Congreso, señaló Human Rights Watch (HRW). La organización expresó su preocupación especialmente por las reformas al Poder Judicial, las que eliminan al Instituto Nacional de Transparencia, el acceso a la Información y Protección de Datos (INAI), la que amplía la prisión preventiva oficiosa y la que transfiere la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena). “Estas peligrosas propuestas socavarían la independencia judicial, otorgarían un poder sin precedentes a los militares, y eliminarían salvaguardas establecidas para proteger los derechos humanos”, señaló en un comunicado Juanita Goebertus, directora de la División de las Américas de HRW. El pasado martes, la Comisión de Puntos Constitucionales del Congreso mexicano avaló la propuesta de reforma judicial del gobernante Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), que propone elegir a jueces por voto popular. Los legisladores del oficialista Morena prevén votar la reforma en el Pleno en septiembre, cuando tendrá los dos tercios del Congreso, necesarios para modificar la Constitución mexicana, tras las elecciones del 2 de junio. La ONG enfatizó en alertar sobre la provisión para crear la figura de ‘jueces sin rostro’ en el combate al crimen, algo que la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CorteIDH) ya dictaminó como violatoria al derecho a un juicio justo. HRW recordó que las propuestas ampliarían la prisión preventiva automática, sustituirían el actual proceso de nombramientos judiciales por elecciones populares y eliminarían las restricciones constitucionales que prohíben a los militares llevar a cabo funciones civiles. También desaparecerían la entidad independiente y garante de la privacidad y la transparencia gubernamental del país. Ante ello, pidió a los legisladores que entran en funciones el 31 de agosto de 2024, que rechacen los cambios constitucionales “Dado el largo historial de graves abusos y encubrimientos oficiales en México, los legisladores deberían adoptar medidas para fortalecer las protecciones de los derechos humanos, no para debilitarlas”, añadió. Riesgos de las iniciativas La ONG expuso que las cuatro iniciativas forman parte de una serie de 18 propuestas de cambios constitucionales que el presidente saliente, Andrés Manuel López Obrador, quien deja el poder el 30 de septiembre, envió al Congreso en febrero pasado. Mientras que la presidenta electa, Claudia Sheinbaum, quien asume el poder el 1 de octubre y cuyo partido, Morena, controla el Congreso, ha respaldado muchas de las propuestas y ha instado a los legisladores a que las aprueben antes de que ella tome posesión. “Estas propuestas socavarían gravemente la independencia judicial y contravendrían estándares internacionales de derechos humanos destinados a garantizar que toda persona reciba una audiencia justa ante los tribunales”, insistió HRW. La ONG dijo que eliminar el INAI y permitir que el Gobierno autorregule su cumplimiento de las leyes de acceso a la información “socavaría los derechos de los mexicanos a la privacidad y al acceso a la información pública”. “México necesita urgentemente instituciones de seguridad y justicia más eficaces”, dijo Goebertus. “Lamentablemente, es probable que estos cambios constitucionales logren exactamente lo contrario”, señaló. Las iniciativas de reforma de López Obrador, especialmente la del Poder Judicial, han levantado críticas de los embajadores de Estados Unidos y Canadá, además de preocupación de calificadoras como Fitch y entidades como CitiBanamex o Morgan Stanley, por los riesgos que conllevarían.