Maricruz Rios / La Voz de Michoacán El reto para la nueva administración federal será generar las condiciones necesarias para poder abonar 750 mil nuevos empleos cada año, para con ello no sólo combatir la informalidad y dignificar las condiciones laborales, sino para favorecer el mercado interno. Con motivo de ascenso de Claudia Sheinbaum Pardo como la primera presidenta de México, el coordinador de Proyectos Estratégicos del Colegio de Economistas del Estado de Michoacán (CEEM), Heliodoro Gil Corona, reconoce que será el empleo formal uno los principales retos a atender en materia económica. El analista del CEEM refirió que unos cuantos aglutinan más de la mitad de las plazas generadas en todo el país, mientras que otros cuantos, entre los que se encuentra Michoacán, manifiestan tasas de crecimiento de formalidad laboral muy bajas. Gil Corona expuso que, si bien ha habido una evidente recuperación desde tiempos por la contingencia sanitaria debido a la pandemia de la COVID-19, no se puede dejar de resaltar en el contexto reciente que la recesión de 2020 con la caída del Producto Interno Bruto en 8.4%, provocó daños severos en la planta de trabajadores del país. Recordó que en esta época álgida de crisis en 2020 se perdieron casi 648 mil empleos formales, “lo que constituyó dato inédito en las estadísticas laborales en México”. Algunos estados han batallado más que otros desde entonces para lograr una plena recuperación, siendo aquellos que poseen industrias más consolidadas las que han tenido cierta ventaja. Pese a esta grave situación económica, el también profesor-investigador de la Facultad de Economía de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH), hizo hincapié en que durante el gobierno del expresidente Andrés Manuel López Obrador se lograron generar 2 millones 310 empleos formales, para un promedio anual de 365 mil trabajos formales. Refirió que, aunque la contingencia sanitaria significó un bache importante en el dinamismo de la economía nacional, en este sexenio el empleo formal creció a una tasa promedio anual de 1.8%, al pasar 20.1 a 22.4 millones de trabajadores asegurados ante el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) entre 2019 y agosto de 2024. “En el periodo reciente la planta laboral formal retomó su recuperación como lo podemos observar el recuento de datos laborales dados a conocer por la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) y los datos del IMSS”, ponderó el académico nicolaita. No obstante, la generación de nuevas plazas, al igual que sucedió con la recuperación económica, no ha sido homogénea entre las diversas entidades federativas. “Como se pudo observar, los estados de México, Nuevo León, Jalisco y Quintana Roo, concentraron el 53.6% de empleo formal generado en el país entre enero y agosto de este año”. Las estadísticas oficiales marcan que estas cuatro entidades aglutinaron 365 mil 499 puestos de trabajo durante los primeros ocho meses del 2024. “En contraste los estados de Sonora, Zacatecas, Morelos, Michoacán, Veracruz, Tabasco y Sinaloa presentaron indicadores negativos, y durante este mismo periodo perdieron 15.9% del total de puestos creados en el país”, abundó el profesor de la UMSNH. Es de recordar que en el balance general del 2024 Michoacán presenta una pérdida de 4 mil 629 puestos de trabajo registrados ante el IMSS, en comparación con el cierre del año pasado. Bajo este escenario, Gil Corona considera que el reto en el mediano y largo plazo para la administración de Claudia Sheinbaum es lograr niveles de empleo formal constantes de 750 mil puestos anuales, “para ensanchar la planta laboral, combatir de manera efectiva la informalidad y fortalecer el mercado interno”. El analista del CEEM apuntó que todo indica que la perspectiva de empleo al cierre de este año es de 22.5 millones de asegurados, un incremento anual de 0.9% respecto a los empleos formales reportados en 2023; “en la actual coyuntura el empleo trota, pero es necesario que en perspectiva manifieste mayor velocidad”.
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