Omar Cuiriz / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán.- Una de las cuestiones más importantes que se tienen que ver en Michoacán es cómo hacer sustentable el cultivo del aguacate, porque es el principal cultivo en términos económicos en el estado, principalmente en ingresos y generador de empleos, resaltó el secretario de Medio Ambiente, Alejandro López Méndez, durante la rueda de prensa sobre el estudio geoespacial de bosques y huertas de la franja aguacatera de Michoacán, convocada por el Instituto de Investigaciones sobre los Recursos Naturales (NIREIRA), de la UMSNH. El secretario recordó que está pendiente de resolverse una queja de controversia presentada ante el T-MEC que pone en riesgo la atención de aguacate en Michoacán, pues hay un panel de controversia que no se ha resuelto y en esa quejase habla de 3 impactos ambientales: -Uno es el cambio de uso de suelo-Otro es el alto consumo de agua-Otro es el abuso de agroquímicos. Dijo que para el cambio de uso de suelo trabajan de la mano con Cuauhtémoc Ramírez Romero, titular de la Secretaría de Agricultura para impulsar una certificación ambiental y que junto al gobernador del estado insistieron a la Secretaría de Agricultura Federal para que no le den permiso de movilidad a aquellas huertas que han deforestado y poyo para ordenar el cultivo. Señaló que no se trata de satanizar aun producto, sino de generarlo responsablemente y encontrar el marco de sustentabilidad. Por su parte el académico e investigador, Alberto Gómez Tagle, explicó que se hicieron estudios y experimentos con árboles nativos y de bosque de pino y encino con sensores que permiten conocer la temperatura, velocidad de flujo, el volumen de agua y otros elementos que permiten conocer cuánta agua consumen cada ejemplar. Los análisis se hicieron en varias huertas de distritos municipios de Michoacán como Capula, San Juan Nuevo y Uruapan analizando el consumo de agua por árbol y confirmando que el aguacate consume mucha más agua que pinos, cedros LA ENORME CANTIDAD DE AGUA Empíricamente se conoce que el aguacate consume mucha agua, pero que hasta ahora no se tenían datos precisos y profesionales de cuántos litros llegan a requerir los árboles de este cultivo. “Consume mucha agua, consume más agua que los bosques de pino-encino, por ejemplo, en Uruapan que era de bosques templados, se han ido resecando y desecando el territorio, por eso necesitábamos medirlo con mucha precisión, necesitábamos saber que consume de 3 a 4.7 veces más que un pino”. Abundaron que el aguacate, al igual que la nuez, son cultivos que producen grasa y por lo tanto grandes cantidades de agua, a diferencia del maíz, trigo o la papá que producen carbohidratos y ocupan menos agua. Los árboles de aguacate consumen agua en proporción a su tamaño, biomasa y superficie de hojas, por lo que ejemplares más grandes tienen un mayor requerimiento hídrico, como en el caso de San Juan, que necesitan 85.35 litros al día, mientras que árboles más pequeños, como en Capula, consumen aproximadamente 39.9 litros diarios. Los datos anteriores son importantes porque se enfocan en cómo son los mecanismos a nivel ecológico y los mecanismos funcionales de los bosques para entender cómo son las alteraciones de los procesos hidrológicos y atacar las problemáticas de manera eficiente. “Es irresponsable decir que el aguacate generó la sequía en el estado, porque tuvimos un año con precipitación de 60% de los años previos por el efecto del años climático, entones ahí es donde se estresan más las plantas por tener calor y poca agua”. El secretario de Medio Ambiente dijo que dentro de la certificación ambiental es parte de la política de regularización del aguacate, se plantea que quien quiera certificarse como productor sustentable de aguacate debe de mantener un pedazo de bosque, por lo que se estudió con académicos de manera rigurosa, cuántas hectáreas de bosque debe haber por cada hectárea de aguacate, y el resultado fue que por cada hectárea de aguacate se deben mantener de 3 a 6 hectáreas de bosque. Lo que busca, es que en Michoacán se tenga mucho bosque, mucho aguacate y mucha agua para el estado, es decir, cuidar y tener un plan para las condiciones que cada vez llegan más adversas respecto al cambio climático a nivel global. LA CERTIFICACIÓN López Méndez dijo que para los productores que quieran certificarse tienen que comprobar que no desforestaron de 2018 a la fecha, que no hubo incendios en la huerta de 2012 a la fecha y que además contribuye con cierta proporción de bosque de 3 a 6 hectáreas dependiendo de variables. Foto: Christian Hernández Explicó que la forma de aportar en la conservación de bosque es que si ya sea que éste tiene bosque propio, se conserve bajo un documento; o que se haga un acuerdo con alguna comunidad o ejido para la preservación de un pedazo de bosque; o bien que haga una plantación forestal. “Lo que buscamos es que el productor de aguacate compruebe que no deforesto y que mantiene el pedazo de bosque que le toca”. Aclaro para quienes cometieron delitos por cambio de uso de suelo, pueden certificarse una vez que acudan a las autoridades correspondientes y reparar el daño.