EFE / La Voz de Michoacán Seúl, Corea del Sur. El presidente surcoreano, Yoon Suk-yeol, levantó hoy, tras una reunión extraordinaria de su gobierno, la ley marcial que había declarado horas antes, al tiempo que aseguró que las tropas que se ocupaban de garantizarla ya se habían retirado a sus cuarteles. Yoon realizó este anuncio en una comparecencia por televisión de madrugada en Corea del Sur, horas después de que el Parlamento del país votase a favor de levantar esta medida, lo que según la Constitución, obligaba a su revocación. Poco después, a las 4.30 horas locales (19.30 GMT), el Gobierno coreano aprobaba una moción para levantar la ley marcial, que se mantuvo en vigor durante cerca de seis horas. La intervención del presidente en televisión de madrugada se produjo poco después de que Estados Unidos defendiese que la crisis abierta en el país se resolviese «pacíficamente» y «de acuerdo con el estado de derecho». La medida excepcional decretada causó conmoción en el país y miles de manifestantes se congregaron en la madrugada del miércoles frente a la Asamblea Nacional para protestar contra la ley marcial y pedir la dimisión de Yoon. El presidente había decretado la ley marcial de emergencia para proteger el «orden constitucional» acusando al principal bloque de la oposición, el Partido Democrático (PD), de «fuerza pronorcoreana», medida que después el Parlamento votó revocar en una sesión extraordinaria. En una declaración televisada la noche del martes, Yoon anunció la ley marcial para proteger el «orden constitucional» de actividades «anti-estatales», de las que acusa al Partido Democrático, con mayoría en la Asamblea Nacional (Parlamento). En una sesión plenaria extraordinaria convocada poco después, la Asamblea Nacional surcoreana obtuvo 190 votos a favor de levantar la ley marcial, lo que según la Constitución surcoreana obligaría al presidente a retirar esa medida. El anuncio de Yoon se produce después de que el PD aprobara sin contar con el apoyo del gobernante Partido del Poder Popular (PPP) unos presupuestos generales para 2025 con múltiples recortes, además de mociones para destituir al fiscal general y al responsable de monitorizar las cuentas de los organismos públicos. La presidencia de Yoon quedó muy debilitada desde que el opositor Partido Democrático ganó las elecciones legislativas el pasado abril y desde entonces su Gobierno no ha podido sacar adelante las leyes que se había propuesto. El mismo Yoon justificó hoy en su discurso televisado que desde que juró el cargo en mayo de 2022 se han registrado 22 procesos de destitución contra miembros de su Gobierno, con la oposición impulsando su décimo intento desde que se reanudó la Asamblea Nacional tras los comicios legislativos. El mandatario conservador dijo que la situación «no tiene precedentes» en la historia del país y en la política global, alegando que las acciones han socavado la capacidad de gestión del Ejecutivo. En paralelo, miles de manifestantes se congregaron en la madrugada de este miércoles frente a la Asamblea Nacional para protestar contra la ley marcial y pedir la dimisión de Yoon. La concentración espontánea tuvo lugar después de que el presidente anunciara pasadas las 22.00 de la noche del martes (13.00 GMT) la medida, lo que cogió por sorpresa al país asiático, siendo la primera vez que es decretada desde los años 80. «Esto ha sido un intento sin sentido de destruir la democracia surcoreana», explicó a EFE Kim Seung-ho, empresario de 60 años que acudió a las protestas, en las que participaron desde adolescentes a gente de edad avanzada que entonaban repetidamente el himno nacional. En mayo de 1980, el dictador Chun Doo-hwan ordenó la ley marcial y los militares detuvieron a los principales líderes políticos de la oposición, se cerraron las universidades, se prohibieron actividades políticas y se restringió la prensa. La actual declaración de la ley marcial fue ampliamente criticada por los partidos de la oposición e incluso por el propio líder del partido de Yoon, Han Dong-hoon, quien dijo que era una medida «equivocada» y se comprometió a «bloquearla» junto a los ciudadanos. El rechazo del Parlamento a la ley marcial deja a Yoon, que antes de declararla se enfrentaba a los índices de popularidad más bajos de su mandato, en una posición muy comprometida. Poco antes de que el presidente anunciase que levantará la ley marcial esta madrugada, el portavoz del departamento de Estado de EEUU, Vedant Patel, había dicho que esperaba que los incidentes en Corea del Sur se resolviesen «pacíficamente» y «de acuerdo con el estado de derecho», por lo que habría que respetar la decisión de la Asamblea Nacional surcoreana de levantar la medida. «Queremos que esto se resuelva pacíficamente de acuerdo con el estado de derecho y, sin duda, una votación así en el legislativo sería consistente con esta aproximación», dijo Patel en una rueda de prensa. Patel confirmó la información adelantada por la Casa Blanca de que el Gobierno del presidente conservador surcoreano, Yoon Suk-yeol, no le informó previamente de su decisión de declarar la ley marcial en el país. La Secretaría General de Naciones Unidas aseguró por su parte seguir «muy de cerca y con preocupación» la inesperada declaración de la ley marcial. «Estamos siguiendo la situación muy de cerca y con preocupación, pero, en este momento, eso es todo lo que tengo que decir», indicó el portavoz del secretario general -António Guterres-, Stéphane Dujarric, este martes durante su rueda de prensa diaria en la sede de la ONU en Nueva York. El won, la moneda de Corea del Sur, moderó su caída frente al dólar estadounidense después de que la Asamblea Nacional surcoreana votara a favor de levantar la ley marcial. La divisa surcorena, que ha llegado a perder casi un 3 % en relación al dólar, retrocedía un 1,5 % a las 18:30 horas (17:30 GMT), según datos de Bloomberg.