El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, dedicó hoy el Día de la Independencia, uno de los principales feriados del país, a las fuerzas armadas y a sus familias, en especial a aquellas desplegadas alrededor del mundo. “Ustedes nos mantienen a salvo y mantienen a Estados Unidos de América como un faro de esperanza para el mundo”, señaló en su mensaje semanal, que fue adelantado un día para coincidir con los festejos patrióticos. “Y por eso, ustedes y sus familias se merecen no sólo el agradecimiento de una nación que aprecia su sacrificio, sino también nuestro compromiso duradero para servirles a ustedes, así como ustedes nos han servido”, añadió. Obama tiene previsto participar en una ceremonia de naturalización y por la tarde en las celebraciones del 4 de julio desde la Casa Blanca, que incluyen un magno espectáculo de fuegos artificiales en el Paseo Nacional, la gigantesca explanada aledaña a la casona presidencial. Aunque el embate del huracán Arthur en la zona atlántica de Estados Unidos alteró los festejos en zonas costeras, no se espera que afecte los planes de celebración en la capital estadunidense. La aparición de Obama en un acto de ciudadanía coincide con el debate nacional sobre lo que su gobierno ha descrito como la “crisis humanitaria” de niños migrantes sin acompañantes. Obama notificó esta semana al Congreso su interés en solicitar un presupuesto de emergencia de dos mil millones de dólares para lidiar con los problemas de procesamiento, albergue y repatriación de los menores, además de pedir facultades especiales para acelerar el regreso a sus países. El Congreso se encuentra en receso por el feriado de la Independencia, pero reanuda sesiones el lunes 7 de julio.