El escritor Hugo Hiriart (Ciudad de México, 1942) dijo que su aspiración es que su más reciente libro, “El águila y el gusano”, resulte divertido, porque para él la diversión es un valor literario muy alto. Consecuentemente con dicha idea, añadió en entrevista sobre dicha publicación, “el peor pecado de una obra es ser aburrida, por eso me esmeré y cuidé que esta fuera divertida y al alcance de cualquiera”. El nuevo libro del escritor, articulista, dramaturgo y académico es, en sus propias palabras, “una divertida obra”, resultado de la reacción que le provoca la vida diaria en el país, pero “como por mi carácter muchas cosas indignantes me dan risa, resulta que es un texto para hacer reír”. Señaló que como a otras personas muchas cosas le resultan molestas, “pero en lugar de hacerme llorar me dan risa”, debido a que surgen de algo que ha llamado “‘estupidez creativa’, que tanto mal le hace al mundo”. El ganador del Premio Xavier Villaurrutia en 1972 por su novela “Galaor” subrayó que este libro es una sátira, una farsa basada en hechos reales, los cuales, dijo, aborda con una depurada técnica literaria. “Se me facilita escribir una narración a partir de escenas de teatro, pero técnicamente el teatro no tiene un narrador, sino que está formado por escenas; en el libro presento escenas de la vida cotidiana y el lector es el narrador que las va hilando”, acotó. “Puede ser que no haya yo logrado hacer una obra que pueda estar al alcance de cualquier lector, pero de que es divertido, seguro que sí me quedó divertido”, señaló el entrevistado.