El gobierno de México, a través de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (SEDATU) y la Organización de Naciones Unidas vía el Programa para Asentamientos Humanos ONU-HÁBITAT, firmaron un convenio de colaboración cuyo objetivo es contribuir a la sustentabilidad ambiental, social y económica del desarrollo urbano en México. El titular de la SEDATU, Jorge Carlos Ramírez Marín y el secretario general ONU-HÁBITAT, Joan Clos I. Matheu signaron el documento compromiso y como testigo lo hizo, el secretario de Relaciones Exteriores, José Antonio Meade Kuribreña. El secretario Ramírez Marín explicó que el objetivo de este esfuerzo institucional consiste en planear ciudades ordenadas, incluyentes y sustentables. La meta es beneficiar a 100 millones de personas que viven en asentamientos precarios, disminuir la pobreza de los más vulnerables con la instrumentación de políticas en materia de vivienda, cambio climático, disminución de riesgos, sustentabilidad y gobernanza, entre otros. El funcionario explicó que el convenio permite alinear objetivos entre los gobiernos de entidades federativas, los municipios y la iniciativa privada. Ramírez Marín precisó que este acuerdo va en coordinación con el Plan Nacional de Desarrollo y el de Infraestructura del Presidente de la República, Enrique Peña Nieto. México, agregó, asume el compromiso internacional y se posiciona en la búsqueda de un desarrollo urbano con ciudades incluyentes y justas. El representante de ONU-HÁBITAT, Joan Clos Matheu, destacó la correlación entre el desarrollo urbano y el cambio climático donde urge una agenda de trabajo que acelere la toma de decisiones conjuntas. Agregó que hay que acelerar la toma de decisiones para asegurar la calidad de vida de los ciudadanos, debido a que se incrementó el consumo de los recursos naturales, principalmente de los no renovables. Reconoció al Gobierno de México por su disposición para compartir conocimientos en materia de desarrollo y planeación urbana a través de la recién creada SEDATU. El secretario de Relaciones Exteriores, José Antonio Meade, también destacó el trabajo realizado en la SEDATU a dos años de su conformación en la administración pública federal y refrendó que este convenio representa una oportunidad para contribuir al desarrollo de las ciudades, que es la base para mantener la armonía y convivencia social. Confió en que este esfuerzo redunde en apoyar a los más vulnerables, a quienes habitan en asentamientos precarios. El canciller mexicano consideró que esta experiencia en un futuro cercano podrá reproducirse en otras regiones de nuestro continente.