Lázaro Cárdenas, Mich.- Si bien la jurisdicción sanitaria, a través de sanidad internacional está poniendo mayor atención a la revisión del estado de salud de los tripulantes de embarcaciones que llegan a este puerto, el ingreso de contagiados por Ébola, es más difícil que ocurra, como puede ocurrir a través de los aeropuertos y las fronteras internacionales. De acuerdo con el responsable de la jurisdicción sanitaria de la costa, José Luis Carrillo Magaña, difícilmente podría haber ingreso de algún marinero contagiado de esa enfermedad, porque el puerto de Lázaro Cárdenas, no tiene contacto directo con puertos africanos y aún cuando fuera indirecto, el periodo de incubación es de 4 a 21 días, por lo que la enfermedad sería evidente a bordo de la embarcación y no se permitiría ingresas a instalaciones portuaria. En Lázaro Cárdenas, precisó, no arriban, como ocurre en manzanillo, barcos de procedencia africana, a donde llegan embarcaciones nigerianas cargados de gas para la regasificadora de aquel puerto. El funcionario explicó que la mecánica obliga a los responsables de sanidad internacional a ser los primeros que tengan acceso a un barco que arribará al puerto para conocer el estado de salud de la tripulación y verificar que la libreta sanitaria de cada uno de los marinos, esté dentro de la vigencia de seis meses luego de haber sido expedida. En caso contrario, de haber enfermo o no habría vigencia en las libretas, el barco queda reducido a lo que se conoce como área de fondeadero, en aguas abiertas y no en las instalaciones portuarias. Hasta el momento, dijo el funcionario, durante el periodo de esta administración no se ha dado ningún caso donde un barco tenga que ser inmovilizado por enfermedad de ningún tipo de su tripulación. Otro mecanismo de alerta, señaló, es la libre manifestación sanitaria del capitán del barco, que se hace vía electrónica y donde da fe de la salud de sus tripulantes y cuya falsedad e datos el duramente penado por ley internacional.