MÉXICO, DF.- Peritos en criminalística y médicos forenses de la Procuraduría General de la República (PGR) y de Argentina trabajan en el tiradero de basura en Cocula, Guerrero, en donde se encontraron cadáveres. Los peritos aplican la técnica de barrido y trazan líneas para identificar indicios de posibles restos humanos para analizar si corresponden a los de los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos en Iguala, Guerrero, desde el 26 de septiembre. Desde lo alto de la cima se observa a los peritos en criminalística y a los médicos forenses trabajar en el fondo del tiradero de basura de Cocula, a unos 20 metros abajo. Vestidos con trajes blancos el personal de la Procuraduría General de la República y médicos forenses de Argentina colocan banderines rojos en los lugars donde encuentran posible evidencia. En la localización de los indicios participan binomios caninos que "peinan" el lugar, tanto en el monte como en el fondo de la barranca. Este tiradero es usado por el Servicio de Recolección de basura de la población de Cocula. Hasta aquí llegaban camiones de basura cotidianamente. A lo largo de la brecha de terracería se encuentran restos de zapatos, huesos de animales y de ropa, así como papeles y envases de plástico. Esta zona se encuentra restringida y custodiada por la Marina, el Ejército, la Policía de Investigación y la Policía Federal. En el cielo, un drone surca los cerros para evitar que personas ajenas a las investigaciones intenten entrar y contaminar el lugar. Esta zona fue señalada por cuatro detenidos por la PGR, quienes participaron en la desaparición de los 43 estudiantes normalistas de Ayotzinapa el pasado 26 de septiembre. Hoy martes, la PGR permitió el acceso hasta el primer perímetro a un grupo de periodistas.