Las mexicanas Arantxa Chávez y Dolores Hernández se quedaron con la medalla de oro de los saltos sincronizados desde el trampolín de tres metros. Las mexicanas sumaron 304.20 para el oro, seguidas del par colombiano de Diana Pineda y Sara Bedoya con 266.16 unidades y las puertorriqueñas Luisa Jiménez y Jennifer Fernández con 250.02. Chávez y Hernández dominaron la competencia desde el primer salto y no tuvieron rivalidad. Por lo que más allá de estar nerviosas salieron al trampolín de tres metros a disfrutar la prueba con clavados bien ejecutados, los cuales fueron bien calificados por los jueces. Conforme avanzó la competencia, el par mexicano se mostró más firme, las cubanas Danay Brizuela y Lidia Vargas estuvieron al acecho, pero no como esperaban las mexicanas, las colombianas Diana Pineda y Sara Bedoya fueron las que más se acercaron. De las cinco rondas que constó la competición, las colombianas brindaron confianza en las rondas, pero las mexicanas ratificaron el sitio de honor que no perdieron para la tercera ronda, donde una vez salieron bien libradas de los jueces. En la antepenúltima fase de la competición, la dupla colombiana se perfilaba para la plata y con 61.56 puntos no querían dejar este metal a las cubanas. Las mexicanas con el inverso de dos y media vueltas brindaron su mejor salto con calificaciones en la sincronía arriba de siete. Las cubanas Brizuela-Vargas soltaron su nivel para pelear por el bronce y cerrar la ronda con 7.5 tanto en ejecución como en sincronía. Ya para la última ronda, las colombianas cerraron con dos y media vueltas atrás y tuvieron un error, que las dejaría con la plata, momento en que las mexicanas con dos y media vueltas al frente con un giro confirmaron su sitio de honor con ocho en ejecución y sincronía con nueve para cerrar con 304.20 unidades. El oro en sus manos y la plata dependía de las cubanas Brizuela y Vargas, quienes debían tirar bien el salto de dos y media vueltas atrás para ascender en segundo sitio, pero no pudieron al obtener cuatro de calificación, algo que fue aprovechado por las puertorriqueñas Jiménez y Fernández para subir al podio.