Fracturado se encuentra el Partido Revolucionario Institucional (PRI), esto ante la evidente inconformidad de aspirantes a candidaturas quienes han sido rechazados sin argumentos por la Comisión Dictaminadora del tricolor. Los priistas acusan del engaño a quienes participaron en los registros y de la simulación de las convocatorias al no acatarlas ni cumplirlas y con ello inclinar la balanza hacia las candidaturas. El presidente organismo dictaminador, Israel Abraham López Calderón, sin mayores argumentos, desechó los registros de los regidores, Marbella Romero y Jorge Molina, quienes cumplieron en tiempo y forma la totalidad de los requisitos de la convocatoria y exigen que se les reconozca su aspiración como candidatos por dos de los cuatro distrito que integra la capital del Estado. A ello se suma la exigencia del empresario de Apatzingán, Sergio Ochoa Vázquez, cuyo expediente fue desechado por la comisión, so pretexto de no entregar en tiempo una credencial. Ochoa Vázquez afirmó que se cumplió con todo lo estipulado en la convocatoria. De manera sospechosa, la comisión consigna el registro del diputado, César Chávez a las 11:15 de la mañana, cuando en realidad su arribo y registro fue extemporáneo, citó el aspirante, quien presentará vídeos y pruebas documentales de sus dichos. En este sentido, exigió que se restituya el proceso interno y advirtió que de continuar esto, se corre el riesgo de perder la plaza política durante la elección del próximo 7 de junio. Los aspirantes emplazaron el precandidato a la gubernatura, J. Ascensión Orihuela a valer el llamado a la unidad y legalidad partidista. Otro de los casos que será denunciado es el del exdiputado local, Raymundo Arreola, cuyo expediente para buscar la candidatura a la alcaldía de Múgica, también fue desechado. La crisis que ha generado la ilegalidad de la Comisión ya provocó la primera la primera toma de la sede estatal priista por parte de antorchistas de Susupuato y Ario de Rosales, por las irregularidades presentadas.