Senadores de izquierda se pronunciaron en contra de la designación de Eduardo Medina Mora como nuevo ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) y ante el pleno lo acusaron de no contar con buena reputación para asumir dicho cargo. Legisladores del Partido de la Revolución Democrática (PRD) como Dolores Padierna, protestaron en tribuna y con pancartas por las presuntas violaciones a Derechos Humanos registradas durante la gestión de Medina Mora en la Secretaría de Seguridad Pública (en la administración de Vicente Fox) y como procurador General de la República, en el sexenio de Felipe Calderón. A pesar de las críticas, el Senado nombró al ex embajador como nuevo integrante de la SCJN, cargo que ocupará por 15 años. ¿En qué casos se cuestionó al ahora ministro? Según los argumentos de la oposición destacan los siguientes. "El Michoacanazo" Lo responsabilizan de la detención en 2009 de 38 funcionarios públicos del estado de Michoacán por presuntos vínculos con el crimen organizado, la cual se realizó a través de la figura del arraigo, es decir, sin cargos de por medio. Atenco Los perredistas acusan que en 2006, cuando fungía como secretario de Seguridad Pública, se implementó un operativo en el municipio de San Salvador Atenco, Estado de México, en contra de los manifestantes que se oponían a la construcción del nuevo aeropuerto. En esa ocasión murieron un par de personas y 26 mujeres denunciaron abusos sexuales de policías. Mujeres indígenas, Jacinta, Teresa y Alberta Sus detractores indican que en 2006, Eduardo Medina como titular de la PGR fue responsable de graves violaciones de los Derechos Humanos de las indígenas Jacinta Francisco Marcial, Teresa González Cornelio y Alberta Alcántara, quienes fueron encarceladas luego de ser acusadas de secuestrar a seis agentes de la Agencia Federal de Investigación (AFI). Eduardo Medina Mora esgrimió que el proceso en contra de las tres mujeres indígenas inició antes de que él asumiera el cargo. Oaxaca y Sicartsa En ambos operativos, derivados de protestas laborales, hubo severas violaciones a los derechos humanos, según recomendaciones de la de SCJN, señaló en tribuna Dolores Padierna. Contra aborto Como ex procurador, impugnó la interrupción legal del embarazo en el Distrito Federal en las 12 primeras semanas de gestación argumentando que sus motivos eran jurídicos, no morales. Sin embargo, 8 de 11 Ministros de la Corte consideraron que no tenía argumentos jurídicos para impugnar la norma aprobada por el congreso local. Antes del nombramiento, el ex embajador en Estados Unidos y Reino Unido recibió críticas de académicos y sociedad civil a través de una petición pública para impedir su llegada a la SCJN. Dicha solicitud reunió poco más de 50 mil firmas.
La Voz de Michoacán
