Notimex / La Voz de Michoacán México, 27 Mar.- Para atender parte del problema que viven las trabajadoras del hogar por la vulneración de sus derechos es necesario trabajar en la capacitación laboral, así como la difusión de información, además de la sensibilización en los medios de comunicación. La directora de Estadística del Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), María Eugenia Medina, consideró que de esa manera se involucra la concientización a todos los actores relacionados con el tema: el gobierno, las instituciones y la población en general. Indicó que en general las mujeres están en una situación de desventaja, independientemente del trabajo que realicen, pero en el caso de las empleadas del hogar ésta se acentúa porque se puede observar explotación laboral, discriminación y violación de derechos, incluso al mismo tiempo. Sin embargo, señaló, las modalidades del empleo doméstico, en donde la mayoría están de entrada por salida, dificultan el seguimiento que se debe dar para trabajar directamente con ellas, hacerles conocer sus derechos o incluso para capacitarlas. Destacó que con los cambios hechos a la Ley Federal del Trabajo el año pasado se determinan de manera específica los periodos de descanso diario y semanal a que tienen derecho las trabajadoras domésticas, aunque éstos se enfocan más a quienes están en la modalidad de planta. La funcionaria del Inmujeres subrayó que con base en los principales problemas que refiere el mismo sector (entre bajos salarios, discriminación y negación de derechos) se debe trabajar para mejorar su calidad de vida en todos los sentidos. En ese sentido coincidió con especialistas como el presidente del Conapred, Ricardo Bucio, en que el trabajo que realiza México en esta materia tiene que estar enmarcado en lo que se hace a nivel internacional, por lo que es necesario ratificar el convenio 189, referente al trabajo decente de las empleadas domésticas. Medina Domínguez explicó que el convenio es más amplio de lo que cubre la ley laboral mexicana por lo que abarcaría tanto a las trabajadoras de tiempo parcial de entrada por salida" y a las de tiempo completo o de planta. De acuerdo con ONU Mujeres las trabajadoras del hogar representan entre cuatro y 10 por ciento de la fuerza laboral en países en vías de desarrollo, aunque en ellos no existen leyes que protejan sus derechos. Según datos de esta organización, presentados en días pasados, sólo 40 por ciento de los países miembros de Naciones Unidas incluyen en sus leyes la protección a las y los trabajadores domésticos, a pesar de que contribuyen al desarrollo económico de sus naciones. Refirió que como parte de la labor que realiza el Inmujeres en este rubro, está la revisión de las leyes existentes y la creación de nuevas "para favorecer a las mujeres, y particularmente a las trabajadoras domésticas", además de visibilizar el tema en la sociedad y los tomadores de decisiones. Se trabaja también, añadió, con la Secretaría del Trabajo en la revisión de los cursos de capacitación que imparte la dependencia, para la concientización de las empleadas domésticas sobre sus derechos, "uno de los caminos es ese, la capacitación, además de la difusión de información y la sensibilización". Ante la recurrente "feminización" de este trabajo en el que prevalecen los estereotipos sobre las funciones de la mujer dentro del hogar, Medina Domínguez señaló que lo que se busca desde el instituto es la revalorización de este oficio tanto el remunerado como el cotidiano que no recibe pago alguno. "Eso, sin duda, también tiene que impactar en el propio trabajo que es pagado, porque una vez que valorizas lo que es el trabajo doméstico vas a valorizar el trabajo que desempeña cualquier persona por un pago", resaltó y subrayó que "las mujeres en todos los ámbitos son sujetos de derechos", por lo que el trabajo a realizar en temas de género debe apegarse a los derechos. Bucio Mújica destacó la importancia de que los tomadores de decisiones conozcan de cerca la situación de las trabajadoras domésticas "es importante que conozcan las estadísticas, que conozcan la situación lo más posible" para construir un dialogo entre las diferentes partes. En ese sentido consideró necesario "despersonalizar" el tema del trabajo doméstico entre los legisladores para poder avanzar en los cambios que se requieren en materia legislativa, es decir que no intervenga la situación en sus hogares.
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