La Bahía de Guanabara, que será escenario para las pruebas de vela en las Olimpiadas de 2016 de Río de Janeiro, se encuentra en el centro de la polémica por la contaminación de sus aguas. La situación ha provocado accidentes a deportistas y, según expertos, supondría una amenaza para la salud. En diciembre pasado, el Instituto Oswaldo Cruz de Río de Janeiro hizo saltar todas las alarmas al afirmar que detectó en ríos que desembocan en la Bahía de Guanabara la presencia de bacterias que podrían provocar la hospitalización de humanos. “Es la tercera vez que se encuentra una superbacteria resistente a los antibióticos comunes en las playas de Río de Janeiro, pero ahora tiene más repercusión por los Juegos Olímpicos”, comentó a Notimex el biólogo Rómulo Barroso. “Lo encontrado recientemente en tres puntos de la bahía es una superbactería muy nociva en ambientes hospitalarios. Eso significa que hay basura hospitalaria yendo al mar, lo que es muy peligroso”, señala la fuente. Barroso subrayó que el riesgo es fundamentalmente porque se trata de una “encina específica resistente a antibióticos normales”, y asegura que “puede provocar que las personas sean internadas si la bacteria entra en contacto con la boca, la nariz o las mucosas”. Cuando faltan menos de 500 días para el inicio de los Juegos Olímpicos de Río 2016, la descontaminación de la Bahía de Guanabara es uno de los asuntos más polémicos de estas Olimpiadas, en especial después de que las autoridades admitieran que no podrán cumplir con la promesa de limpiar toda la basura acumulada. Decenas de atletas –brasileños y extranjeros-, entre ellos algunos campeones mundiales, han criticado los últimos meses la situación de las aguas, donde los días de marea presentan un aspecto nada conveniente para el deporte, con peces muertos y deshechos de todo tipo, desde cadáveres de animales hasta sofás. Un vídeo publicado esta semana por la prensa brasileña mostraba claramente los peligros para los deportistas profesionales: Una pareja de regatistas brasileños tuvo recién un accidente mientras navegaba con su embarcación de vela a alta velocidad a causa del impacto con lo que supuestamente era una gran caja de plástico flotando en el mar. Ante las críticas, autoridades desplegaron decenas de pequeños barcos de limpieza e instalaron filtros en la desembocadura de algunos ríos, pero no logran atajar la contaminación que baja por algunos de los 50 ríos que, en su mayoría, son utilizados como vertederos y desembocan en la bahía. Las autoridades anunciaron el mes pasado un presupuesto de 500 millones de reales (unos 160 millones de dólares) para descontaminar al menos el 80 por ciento de la bahía durante los próximos 19 meses, pero el propio gobernador de Río de Janeiro, Luiz Fernando Pezão, admitió que esa meta puede ser no alcanzada. Los Juegos de Río, a realizarse del 5 al 21 de agosto, tendrá la participación de 10 mil 900 atletas de 204 países en 42 competiciones deportivas.