El sub secretario del Departamento de Seguridad Interna (DHS) de Estados Unidos, Alejandro Mayorkas rechazó hoy las acusaciones de que practicó favoritismo político en el proceso de emisión a visas a solicitantes prominentes. El Inspector General (IG) del DHS sostuvo que Mayorkas uso su cargo como director de la 0ficina de Aduanas y Servicios Migratorios (USCIS) para a favorecer casos que involucraron al hermano de Hillary Clinton, al senador Harry Reid y al ex gobernador Ed Rendell, todos demócratas. “En estos tres casos, hice mi trabajo (…) Hice y cumplí mi responsabilidad. No permití que se cometieran errores, y me aseguré que fueran resueltos correctamente”, dijo en una audiencia ante el Comité de Seguridad Nacional de la Cámara de Representantes. Mayorkas, quien dejó el cargo de director del USCIS para convertirse en el número dos del Departamento de Seguridad Interna (DHS), lamentó sin embargo que su intervención en los tres casos haya generado la percepción de favoritismo. “Aún la apariencia de algo inapropiado es inaceptable para mí”, dijo el funcionario, quien tomó los pasos necesarios y consultó con abogados del DHS, para evitar la percepción de que su intervención en los casos era inapropiada. De acuerdo con la investigación del IG, Mayorkas utilizó su posición para beneficiar a amigos bien conectados para visas bajo el programa “EB-5”, que concede la residencia permanente a quienes inviertan de 500 mil a un millón de dólares en proyectos que generen empleos a estadunidenses. Un total de 15 funcionarios del USCIS testificaron que Mayorkas tuvo acceso especial a los casos y ejerció un inapropiado “favoritismo político” en beneficio de “solicitantes prominentes”. Aunque el IG no acusó a Mayorkas de cometer un acto ilegal, su reporte dejó en claro que el funcionario violó las directrices internas que él mismo redactó para garantizar la imparcialidad en el análisis de los casos. Su pesquisa, completada antes que Mayorkas fuera confirmado como sub secretario de seguridad nacional en julio del 2013, realizó 50 entrevistas y analizó más de 40 mil récords telefónicos y más de un millón de documentos y correos electrónicos. La audiencia detonó una escaramuza retórica entre su presidente, el republicano de Texas Michael McCaul y los demócratas del comité que impugnaron la decisión de que Mayorkas testificara bajo juramento, en contraste con el testimonio oral del Inspector General. El legislador Bernie Thompson, el demócrata de más alto rango del Comité, sostuvo que aún cuando la pesquisa del IG se centró en los casos de tres demócratas, varios republicanos se acercaron a Mayorkas con peticiones similares para intervenir en otros casos de visas. McCaul, el presidente del Comité, cuestionó en particular a Mayorkas sobre el caso de la empresa Greentech, propiedad de Gulf Coast, dirigida por Tony Rodham, hermano de la ex primera dama Hillary Clinton y el expresidente del Partido Demócrata y actual gobernador de Virginia, Terry McAuliffe. El reporte del IG señaló que Mayorkas revirtió la decisión de empleados del USCIS de negar las visas bajo el programa EB-5. Cuestionado sobre su intervención, Mayorkas sostuvo que intervino en el caso a petición del secretario del DHS toda vez que generó atención en el Congreso por parte de legisladores demócratas y republicanos, pero negó realizar algo inapropiado.