Maravilloso, encantador y muy prendido fue el espectáculo “Alebrijes iluminados”, realizado anoche en el Museo de Arte Popular (MAP), mismo que a decir de sus autoridades, congregó a cerca de seis mil personas. Esta artesanía cien por ciento mexicana, que representa a un ser imaginario conformado por elementos fisonómicos de diferentes animales, causó furor entre chicos y grandes que se dieron cita tanto al interior como al exterior de dicho recinto. Fueron cinco monumentales alebrijes iluminados y articulados, así como dos en menor tamaño, los que por espacio de dos horas, provocaron que el museo se viera rebasado ante la extraordinaria convocatoria de dicho evento. El director del MAP, Walther Boelsterly, se mostró sorprendido por la cantidad de personas que acudieron no sólo a ver, sino a fotografiarse una y otra vez, con estos personajes que representaban a un caballito de mar, un pez, un dragón, un armadillo, un pájaro de dos cabezas y un caracol. “Se trata de una prueba más de que estos personajes son exitosos, comenzamos en un principio con los ‘Alebrijes monumentales’, de los cuales llevamos ocho ediciones con 15 millones de personas que los han visto. “Y hoy comenzamos con los ‘Alebrijes iluminados’, que han tenido una buena aceptación; esta noche tenemos alrededor de seis mil personas”, comentó al tiempo que refirió que se trata de personajes que se presentaron en la pasada edición del Festival Internacional de Luces México. Para el también promotor cultural, el fenómeno del alebrije radica en tres aspectos: la magia que posee el artesano mexicano; segundo, la gran respuesta que tiene el público con el MAP y por último, en la necesidad del propio público de ver manifestaciones culturales. A pesar de que el evento tenía un horario de 20:30 horas, 30 minutos antes decenas de personas hicieron largas filas para poder ingresar al MAP, mismas que se extendieron sobre Independencia, rodeando Revillagigedo y José Azueta hasta salir a Avenida Juárez. Al verse saturado en su interior, algunos de los alebrijes tuvieron que salir del recinto y ser apreciados desde el exterior del mismo, donde chicos y grandes de inmediato comenzaron a fotografiarse una y otra vez. Por momentos la seguridad de los visitantes se puso en peligro, toda vez que sobre Independencia los automóviles pasaron muy pegados a los espectadores, y es que la banqueta no fue suficiente para las decenas de personas que arribaron a dicho museo. Sin embargo, la fiesta de los alebrijes se vistió de color y muchas luces mostrando a esos personajes que dejaron boquiabiertos a algunos, mientras que a otros les provocaron terror, a pesar de estar muy “prendidos”. Al acercarse el final de este espectáculo, las monumentales piezas ingresaron el museo, donde una menor cantidad de gente los esperó para continuar con los flashes y las selfies. “Alebrijes iluminados” continuará todos lo miércoles de agosto y septiembre, excepto el 16, en el MAP.