La reactivación del volcán Cotopaxi la semana pasada puede constituirse en un potencial peligro con flujos de lodo que podrían afectar a miles de personas en su zona de influencia, se informó el lunes, mientras el mal tiempo impidió un sobrevuelo de las autoridades sobre su cráter y laderas. El volcán nevado se encontraba el lunes en una fase de relativa calma luego de que el viernes y sábado generó varias columnas de ceniza, gases y flujos ardientes que causaron alarma en el país. Pero el mayor peligro potencial es que en caso de erupción puede producirse un deshielo de sus gigantescos macizos de nieve que causarían enormes flujos de lodo. La secretaria de Gestión de Riesgos, María del Pilar Cornejo, en rueda de prensa dijo ese lodo podría afectar a unos 110.000 habitantes de la provincia de Cotopaxi, donde está el nevado; mientras que en la vecina provincia de Pichincha involucraría a entre 80.000 y 200.000 personas, y en la también vecina provincia de Napo, a unas 15.000, dependiente de la magnitud de una erupción. El ministro de Seguridad Interna y Externa, César Navas, destacó que "en las últimas horas no se ha presentado incremento en la actividad del volcán Cotopaxi". Precisó que por las malas condiciones del clima en la zona no se pudo cumplir con un sobrevuelo "para observar el cráter y también las incidencias en las faldas del volcán". El Cotopaxi, a unos 50 kilómetros al sur de la capital, es un cono nevado de 5.897 metros de altura que se encuentra en los Andes centrales de Ecuador. Cerca se encuentran poblaciones como Latacunga, Salcedo y otras. Su última erupción se produjo en 1877. El secretario de Comunicación, Fernando Alvarado, felicitó a los medios de comunicación por el estricto cumplimiento de una censura previa de la información sobre el Cotopaxi, al tiempo de añadir que operadoras celulares, canales de televisión por cable y medios de comunicación públicos y privados emitirán alertas para mantener informada a la población. El sábado, el presidente Rafael Correa firmó un decreto declarando en estado de excepción al país, lo cual restringe algunos derechos, permitirá movilizar recursos sin engorrosos trámites burocráticos, y establece censura previa de información acerca del volcán. Por ley, la medida de emergencia no podrá extenderse por más de 60 días. Como parte de ese decreto se prohíbe también la difusión de información no autorizada por cualquier medio, ya sea público o privado o por redes sociales. "La ciudadanía solo podrá informarse por los boletines oficiales que al respecto emita el Ministerio Coordinador de Seguridad", se informó. El viernes se registraron cinco explosiones de gases, vapor y ceniza que alcanzaron hasta ocho kilómetros por encima del cráter. Las nubes, llevadas por el viento, dejaron caer una lluvia de ceniza sobre poblaciones como Machachi. El sábado se registraron nuevas explosiones y el descenso de nubes ardientes por el occidente del volcán.