Un manejo experto de las figuras literarias y una gramática perfecta es lo menos importante cuando la intención es conocerse a sí mismo. A través de la literatura el ser humano comparte experiencias y emociones con gente que se encuentra cerca o lejos, pero también sirve para realizar una introspección, un viaje interior. Así lo demostró un grupo integrado por 26 escritores principiantes de entre 13 y 18 años, quienes hablaron de sus gustos, inquietudes y recuerdos en el espacio propuesto en el taller de poesía para jóvenes aventureros, Primer viaje, el movimiento del verso. La presentación del fanzine Primer viaje, fue el resultado final del curso impartido en el Polifórum Digital de Morelia, cada participante escribió por lo menos un poema, con motivos y técnicas distintas (poesía digital, urbana, lineal, intercultural, corporal y caligramas). El evento final fue una tertulia en la que el programa se conformó por un performance, beatbox y lecturas, además, se acompañó de la apertura de la exposición de poemas en tercera dimensión, que estará abierta al público lo que resta de esta semana. “Los niños no juzgan tanto, por eso todo lo que sienten debe ser plasmado, por eso decidimos hacer este proyecto”, explicó la profesora de literatura Ingrid Linuet Nava, cuyos alumnos del bachillerato José Vasconcelos, así como los del profesor Abdiel Martínez del instituto Lancaster. El objetivo era mostrar a los jóvenes otras alternativas de diversión y ocio, de este modo pueden canalizar su energía y su creatividad, además de aprender a expresar sus emociones y practicar la escritura, como lo hizo Carlos Rangel Cardoso, quien compartió una de sus creaciones literarias. Bajo el lema “La vida es un viaje en paracaídas y no lo que tu quieres creer”, tomado del poema Altazor de Vicente Huidobro, Luis Pedraza, Erick Pineda y Andrea Escobedo fueron algunos de los talleristas que compartieron sus conocimientos con los jóvenes, para impulsarlos a desarrollar sus capacidades en el lenguaje escrito y expresar sus emociones. Escobedo destacó la importancia de ofrecer espacios artísticos para los niños y jóvenes “donde puedan tener un acercamiento a la poesía para expresarse y encontrarse a sí mismos y a los demás, conocer otras perspectivas”. “Metamorfosis” es el nombre del performance interpretado por el invitado Mario Nava, graduado de la licenciatura en danza de la Facultad Popular de Bellas Artes de la Universidad Nicolaita, “siempre estamos muriendo y reviviendo, y aprendemos de la pérdida, porque en la vida estamos en constante cambio”, la coreografía surgió hace 8 años, fue su primer trabajo profesional, por lo que marcó un antes y un después en su vida. El espectáculo se integra de 5 actos, el primero fue el que se presentó el pasado 14 de agosto en el Poliforum, como parte del programa de clausura del taller que inició el pasado 16 de enero. Cabe mencionar que esta nota se reporteó con el apoyo de un par de los alumnos que cursaron el taller.
La Voz de Michoacán
