El presidente de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) de Michoacán, José María Cázares, aseguró que en los cadáveres de los 42 presuntos delincuentes asesinados en el enfrentamiento del 22 de mayo en Tanhuato "no encontramos balas en la cabeza". Un elemento de la Policía Federal también murió en los hechos. El funcionario agregó que se encontraron balas "en la espalda y en diversas partes del cuerpo", así como armas de distintos calibres a un lado de los cadáveres. Entrevistado en Radio Fórmula, en el rancho "El Sol" se encontró una bodega quemada, donde había tres cuerpos calcinados. El ombudsman local señaló que la CEDH no tiene elementos para determinar si hubo ejecuciones o no. El lunes, la Procuraduría General de Justicia del Estado de Michoacán (PGJEM) remitió el caso a la Procuraduría General de la República (PGR). Ayer martes, el titular de la PGJEM aseguró que en la mayoría de los cuerpos del caso Tanhuato no hay evidencia de tiros de gracia, pero se investigan “uno o dos casos” de disparos a corta distancia para determinar si hubo un enfrentamiento cuerpo a cuerpo o se trató de una ejecución.