El escándalo por los abusos sexuales cometidos por sacerdotes contra menores llegó hoy a la muestra de cine de Venecia con la película “Spotlight”, de Thomas MacCarthy, centrada en el caso de encubrimiento del cardenal Bernard Francis Law. La cinta reconstruye la investigación periodística publicada en 2002 por The Boston Globe que aborda la complicidad del purpurado en la cobertura de esos crímenes contra menores en la Iglesia de Boston. La investigación destapó la caja de Pandora sobre abusos sexuales cometidos al interior de la Iglesia en Boston y llevó a la quiebra de la diócesis de esa ciudad, obligada a pagar millonarios resarcimientos a las víctimas. Aunque el filme, que cuenta con las actuaciones de Mark Ruffalo, Michael Keaton, Rachel McAdams y Stephen Tucci, entre otros, no participa en la sección de concurso, fue recibido con aplausos durante su proyección a prensa y crítica. La trama se centra en la labor de investigación de “Spotlight”, el equipo de cuatro reporteros de investigación del diario, que casi casualmente comenzó a indagar sobre el tema. Uno de los aspectos abordados por la cinta es el de la traición de la fe a manos de curas que abusaron no solamente físicamente, sino también espiritualmente de sus víctimas, en la mayoría de los casos menores de familias pobres y disgregadas que veían en la religión su única ancla de salvación. “Decidí afrontar este tema (el de la traición de la fe) porque era inherente a la historia global”, declaró MacCarthy en rueda de prensa. Dijo que la historia fue construida minuciosamente a través de entrevistas con los protagonistas reales, como los periodistas que revelaron el caso, los abogados y algunas de las víctimas. “Muchos de los supervivientes del abuso sexual me hablaron de esa doble traición, es decir, del abuso físico y del espiritual que enfrentaron de parte de la religión que era muy importante en sus vidas”, señaló. Con un ritmo ágil y dinámico, la película es eficaz en reconstruir un caso que cimbró los cimientos de la Iglesia católica, pues a raíz de las acusaciones contra Law como encubridor de pederastas el Vaticano debió asumir una conducta más rigurosa sobre el tema. MacCarthy insistió que todo lo que el filme muestra está sólidamente documentado y defendió la importancia del periodismo de investigación. “Este filme subraya la importancia que puede tener el periodismo de una investigación dentro de una sociedad, pero no estoy tan seguro de que el público entienda la relevancia de un periodismo libre”, acotó. Dijo esperar que la cinta sea “usada” por el Papa Francisco y por el Vaticano “para enderezar los errores” cometidos por la Iglesia católica, aunque se mostró escéptico sobre la posibilidad de cambios profundos dentro de esa institución. “Soy muy pesimista sobre la posibilidad de que haya cambios dentro de la Iglesia católica. Los cambios aún deben verse. Una cosa son las palabras y otra las acciones”, consideró. También Mark Ruffalo, quien interpreta a uno de los reporteros del equipo de “Spotlight”, defendió la importancia del periodismo de investigación en un momento en que el periodismo en general enfrenta grandes retos con las nuevas tecnologías e instrumentos de comunicación. El actor resaltó el impacto que tuvo en Boston (y en todo el mundo) el reportaje que llevó al alejamiento de Law (considerado entonces un “papable”) de la diócesis y su envió a Roma como arcipreste de la basílica de Santa María la Mayor. Según SNAP, una organización de víctimas de abusos sexuales cometidos por sacerdotes, el cardenal Bernard Francis Law no hizo nada para evitar cinco mil casos de ese tipo y, específicamente, entre 1984 y 2002 encubrió a unos 250 curas acusados de esos delitos.