Alguna vez se han puesto a pensar en los hábitos que comúnmente tenemos, sí la respuesta es no, te decimos porque debes empezar a tomar atención en ello. Los malos hábitos nos pueden enfermar de diversas maneras por eso debemos evitar los siguientes: Dormir menos de lo necesario: según estudios no dormir lo suficiente tiene como consecuencia el aumentan las posibilidades de sufrir infartos y enfermedades cardiovasculares, en comparación de quienes duermen una hora más al día y están más cerca de descansar lo que se recomienda. Estresarse: La tensión recurrente obliga a las glándulas suprarrenales a trabajar horas extras al punto en que terminan exhaustas e inhiben el funcionamiento del sistema inmunológico, así que ya sabes el origen de alergias, gripes y demás. Uso de aspiradoras: si quieres limpiar la casa es mejor que olvides la aspiradora, pues este artefacto puede provocar graves afecciones en nuestra salud, ya que el polvo no es eliminado y se queda en el aire, con el riesgo de ser inhalado. Dormir con almohadas y colchón:Una persona promedio arroja 1,5 millones de células por hora, incluso sin hacer nada. Mientras dormimos dichas células se acumulan en las almohadas y los colchones y con ello los ácaros del polvo crecen y se asientan.La acumulación de ello se vuelve terrible con el paso del tiempo y perjudicial por ejemplo para personas alérgicas o con bajas defensas. No desayunar:Es lo peor que puedes hacer, pues es el alimento más importante del día, tanto que los nutriólogos recomienda comer una fruta o algo pequeño después de 20 minutos de haber despertado, pues tu cuerpo necesita gran energía para hacerte despertar. Por ello debes desayunar una hora y media después de levantarte. Consumo excesivo de grasas: Tener una dieta rica en alimentos chatarra y grasas aumenta considerablemente el colesterol “malo” (LDL) en la sangre, lo que provoca problemas cardíacos. Ahora ya lo sabes, a desaparecer los malos hábitos.