Famosos que han pensando en el suicidio

La Voz de Michoacán. Las últimas noticias, hoy.

Las razones son diversas pero el suicidio se ha convertido en un pensamiento común de muchos famosos que sin importar de su dinero o popularidad han pensado en quitarse la vida para resolver sus problemas.

Apenas hace unos días fue la aclamada modelo británica Cara Delevigne la que declaró que cuando tenía quince años tenía pensamientos suicidas por la presión de la escuela aunado a un ataque de nervios, pero sólo se una a una larga lista.

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Lana del Rey generó polémica cuando declaró a una revista que “desearía estar muerta”, mitificando la muerte de sus ídolos como Kurt Cubain, quien logró ese cometido. George Clooney tuvo una caída en el 2005 que le dejó serias secuelas como el no poderse sostener en pie o un tratamiento en cama, por lo que pensó que la única salida de sus intensos dolores era la muerte.

Tras su divorcio con el cómico Russell Brand la cantante Katy Perry agradece que haya llevado sólo a pensamientos y no acciones sus pensamientos de morir; otra que el amor la dejó tan deprimida como para pensar en esa solución fue la actriz Halle Berry, quien después de su primer matrimonio fallido con el jugador de beisbol David Justice y su baja autoestima quiso inhalar la mayor cantidad de gas para quedar inconsciente, pero el imaginarse a su madre con su cuerpo la detuvo.

La adicción al alcohol y a las drogas llevó a Owen Wilson a cortarse una de sus muñecas a ingerir una sobredosis de pastillas en su casa, pero su hermano llamó a la ambulancia y evitó que el hecho pasara a mayores. Quienes también pasaron por la misma situación fueron Britney Spears al intentar ahorcarse con una sábana durante su estancia en una Clínica de Malibú y el rapero Eminem, que incluso estuvo a punto de morir por una sobredosis la droga metadona, que se utiliza por los adictos a la heroína.

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La exitosa estadounidense Oprah Winfrey vivió una niñez complicada y llena de abusos hasta que a los 14 años se embarazó. Al saber que no quería tener a su bebé y que antes debía morir pensó en el suicidio a tal grado que ingirió detergente; cuando perdió al bebé sintió un gran alivio porque pensó que sólo así tendría una segunda oportunidad.