Las percusiones del grupo Folikanuya comienzan a sonar, son el llamado a los amantes de las letras, poco a poco la gente comienza a llegar y se suma al canto dedicado a la siembra. Es tiempo de cosechar, después de labrar la tierra y cultivar la amistad, lectura, solidaridad y trabajo constante. Librósfera es el fruto, un encuentro para recordar a los que se fueron y compartir lo que se ha hecho en el año y los proyectos para el siguiente, con tal de sumar apoyos, fuerzas y energía. Librósfera comenzó. Nómada café es la sede del encuentro que concluirá mañana. Aunque el pretexto para reunirse son los libros, a la cita acudieron músicos, artistas escénicos y visuales. El canto tradicional africano de Guinea hacía que el corazón latiera a un ritmo distinto, enérgico y alegre. El flautista Guillermo Portillo no resistió la tentación y abrió uno de los estuches que llevaba, para improvisar junto a Jorge Pointelin, Hector Lizcano, Andrea Meda , Masimo d´ Lia, Daniela Ortega y Antonio Satier, integrantes de Folikanuya, quienes fueron los encargados de abrir las actividades de la segunda edición de Librósfera el jueves pasado. Mientras tocaba, Portillo hacía malabares junto a Osman, de Circotorreo; clavas, pelotas y hasta un destapa caños sirvieron para el breve espectáculo donde el músico y el payaso hicieron de las suyas para sorpresa de los espectadores. Mientras Folikanuya estaba en el escenario, los fotógrafos Wendy Rufino y Jorge Arce montaban una exposición en el muro del fondo, con el tema de la Danza. Inspirados en la expresión del ser humano que mediante el cuerpo se nutre de la tierra y el entorno y, a la vez, lo comparte con quienes la admiran, los artistas gráficos retratan la danza en los escenarios y en la calle, donde los seres humanos se reúnen para reconocerse en el cuerpo del otro. Música, fotografía y arte circense fueron el aperitivo para uno de los platos fuertes, enfocado en la literatura. El taller literario El Noveno invitado ofreció una lectura colectiva, coordinada por Benjamín Rosales y Juan García Chávez, los textos trabajados en el taller que se reúne una vez al mes para ayudar a dar forma a las ideas e historias de escritores y amantes de las letras que gustan expresarse a través de la literatura. Para leer la nota completa, consulta la edición impresa de este 19 de diciembre del 2015.