Insulina: Mitos y realidades sobre su uso

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El Universal / La voz de Michoacán

Ciudad de México. La diabetes es una de las enfermedades que más padecen los mexicanos, por lo que su tratamiento ha generado un sin fin de mitos.

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Es por ello que platicamos con la Lic. Jacqueline Alcántara, Educadora en Diabetes, para que nos despejara algunas dudas sobre la técnica correcta de inyección de insulina, que a su parecer es el mejor tratamiento para las personas que viven con diabetes. Sumado a una alimentación saludable y una activación física adecuada, ambas indicadas por el médico tratante, se puede recuperar una excelente calidad de vida.

Mitos1.- La insulina se obtiene de cadáveres.

Falso. La insulina es una hormona que el cuerpo produce de forma constante y natural. Al haber insuficiencia de ésta, o al no ser completamente aprovechada, surge la necesidad de ser administrada de forma externa. La insulina que se inyecta en las personas que viven con diabetes es creada en un laboratorio, exactamente igual a la que genera el cuerpo, por lo cual no genera ningún daño.

Mito2.- Si me inyecto insulina me provocará ceguera.

Falso. Sin aplicaciones de insulina a tiempo la diabetes se descontrolará y esto es lo que sí podría ocasionar ceguera. Los vasos sanguíneos de la retina se pueden dañar por los niveles altos de glucosa en la sangre, provocando retinopatía diabética, afectando la visión. Con tratamientos de insulina, las personas que viven con diabetes reducen un 76% el riesgo de padecer enfermedades oculares.

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Mito3.- La insulina ocasiona pólipos y lipodistrofias.

Falso. Por macabro que parezca, lo único que podría provocar estos daños es una técnica incorrecta de inyección. Para evitarlo, se deben elegir las agujas más cortas y delgadas que existen (4mm para plumas y 6mm para jeringas), elegir los sitios de inyección adecuados, rotar los sitios con frecuencia y no reutilizar las agujas. La insulina es totalmente inofensiva.

Mito4.- Si necesito insulina, quiere decir que estoy a punto de morir.

Falso. Si su médico le ha indicado iniciar la terapia de insulina para poder controlar su diabetes, no es porque su diabetes esté peor y esté grave. La insulina es una herramienta que ayudará a mejorar el manejo de la diabetes. Sin ella, su glucosa en sangre puede descontrolarse y podría correr el riesgo de desarrollar serias complicaciones asociadas con la diabetes.
Le tengo miedo a las agujas ¿Cómo podré inyectarme?
Ya sea por usted mismo o que alguien más lo haga, las inyecciones de insulina ahora son menos imponentes, impactantes y menos doloras si se utilizan las agujas más cortas y ultra finas que existen con una técnica de inyección correcta. Estas agujas son tan pequeñitas que no asustan y el piquete apenas es perceptible, gracias a su tecnología PentaPoint con su corte diamante de 5 biseles, contribuyendo así de manera importante a la adherencia al tratamiento.

Mito5.- La insulina provoca aumento de peso.

Falso. La razón por la que la gente nota que ha subido algo de peso al iniciar tratamientos con insulina se debe a que cuando los niveles de azúcar en la sangre están muy elevados muchas de las calorías consumidas son desechadas por medio de la orina. Al iniciar un tratamiento con insulina, esas calorías en lugar de ser desechadas son absorbidas, causando dicho aumento de peso. Para evitarlo se debe seguir una alimentación de acuerdo a las necesidades calóricas de cada cuerpo y una rutina de ejercicio adecuada. Sobre todo en estas fechas que se acostumbra el pan de muerto y los dulces tradicionales, es necesario cuidar las porciones consumidas.

Realidad.- La insulina complicará mi vida.
Depende del punto de vista de cada quién. Es cierto que cuando se vive con diabetes se debe tener mayor disciplina y mejorar algunos hábitos, pero también es cierto que la insulina ayudará a mejorar la calidad de vida. Si añade a su tratamiento de insulina una alimentación y rutina de ejercicio adecuados, notará los beneficios y se sentirá mejor y con más energía. Con paciencia, educación y constancia, la inyección de insulina será parte de la rutina diaria sin mayor complicación.

Realidad.- Me puede dar un shock insulínico.