Por mayoría de votos, las comisiones del Congreso local dictaminaron a favor de los matrimonios “igualitarios” en Michoacán, es decir, las bodas reconocidas por el Estado ya no se restringirán a la unión legal entre hombre y mujer con fines de procreación. Los diputados reescribieron el matrimonio como la unión legítima de dos personas para procurarse ayuda mutua, guardarse fidelidad, perpetuar la especie y crear una comunidad de vida permanente. Los legisladores definieron a las sociedades de convivencia (conocidas popularmente como bodas gay) como la unión de dos personas mayores de edad para establecer un hogar común con voluntad de permanencia y de ayuda mutua. Con dicho dictamen, las comisiones dan cumplimiento a la recomendación general emitida por la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CEDH) para eliminar toda forma discriminación por preferencias sexuales en el Código Familiar del Estado. Michoacán reconocerá las bodas gay cuando los contrayentes mayores de edad acudan ante el Registro Civil, expresen “sí, quiero” y establezcan por escrito las condiciones patrimoniales de la sociedad de convivencia bajo un hogar común. En forma paralela, las comisiones legislativas de justicia y derechos humanos del Congreso también redactaron una nueva definición de concubinato para quedar como la unión de dos personas, sin impedimentos para matrimoniarse, por vivir en común por un mínimo de dos años o por haber concebido un hijo en común. Para más información consulte la edición impresa de este 18 de febrero