Luis Sigfrido Gómez Campos Se ha dicho hasta el cansancio que la sociedad ya despertó, que ahora nuestro país vive un nuevo momento después de los sismos de septiembre y que la gente ya no es la misma masa amorfa y manipulable de hace apenas algunos años; que ahora sí la gente tiene una verdadera conciencia política y será difícil manipularla para que vote por alguien que no merece su confianza; que ya la sociedad está cansada hasta el hartazgo de los partidos políticos que solamente ofrecen más de lo mismo y recurren nada más al pueblo en tiempos electorales para pedirle su voto. En fin, se dice que la ciudadanía ye les perdió la confianza a los candidatos tradicionales y que ahora votarán por la opción correcta. Ahora el problema consiste en determinar cuál es la opción correcta por la que todo ciudadano consciente debe manifestar su voluntad a la hora de ir a las urnas. Si los partidos políticos sólo son mercenarios que lucran con la política, la lógica nos indica que debemos optar por una opción ciudadana, por una persona que no esté contaminada por los partidos que se han apropiado injustificadamente de algo tan sagrado como la política. Pero sucede que la opción de votar por un independiente también representa un problema dado que se registraron 74 candidatos por la vía libre, de los cuales 7 son mujeres. Todos y cada uno de ellos, para poder ser considerados como candidatos a la Presidencia de la República, deberán reunir antes del 12 de febrero del próximo año, un total de 866,593 firmas, a través de un programa o aplicación proporcionado por el INE, por lo que a partir de ya, todos quienes han manifestado su hartazgo por los partidos tradicionales deberán aplicarse a conseguir la lista de los 74, ponerse a rastrear su perfil profesional y político en las redes sociales y contribuir con su granito de arena para que el candidato independiente de su elección tenga la posibilidad de ser considerado como candidato a la Presidencia de México para las elecciones del 2018. La otra opción más cómoda, es considerar que de los 74 aspirantes que se registraron solamente tienen serias posibilidades los que han tenido la oportunidad de difundir su imagen y sus ideas a través de los medios de comunicación y las redes sociales, quedando reducida la lista a sólo cinco precandidatos, los cuales serían: Margarita Zavala, “Marichuy”, El bronco, Armando Ríos Piter y Pedro Ferriz de Con, los otros, no obstante que puedan portar credenciales de alto rango académico, empresarial o de activismo social, no dejan de ser hoy por hoy unos soberanos desconocidos para la opinión pública nacional; muy probablemente ni alcancen a reunir la cantidad de firmas que se requieren. Lo peor de todo es que ellos lo saben y, si no lo saben, son unos ingenuos que sueñan con la grandeza sin medir que toda iniciativa seria requiere de un gran esfuerzo, cordura y empeño. Nada se da de manera gratuita. Algunos de los que fueron a manifestar su voluntad de participar como independientes, los menos, quiero suponer, sólo se inscribieron para asuntos de currículum, para poder contarle a sus nietos que fueron precandidatos a la grande, para reírse del sistema y de sí mismos. Éstos, no ayudan en nada a la democracia ni a México; solamente contribuyen a restarle seriedad a un proceso que de inicio se antoja difícil y competido. Si bien están haciendo uso de un derecho, también están mostrando que no dejamos de ser ese pueblo “globero”, “chicharronero” y mercachifles, que se toma las cosas más serias con ligereza. Esperábamos ver en la lista de 74 aspirantes a la Presidencia de la República por la vía independiente más michoacanos, pero al parecer sólo dos mostraron su intención: Roque López Mendoza y María Concepción Ibarra Tiznado. Roque López Mendoza es oriundo de Santa Ana Maya, Michoacán, de 75 años, Contador Público, vecino de la ciudad de Morelia y quien ya había aspirado en más de una ocasión a contender por la vía independiente para gobernador de Michoacán y a la Presidencia de México en las pasadas elecciones. Él expone su plan de gobierno en la internet y está solicitando el apoyo de sus paisanos para recaudar firmas y fondos para su campaña. María Concepción Ibarra Tiznado al parecer es oriunda de Michoacán, pero tiene muchos años radicando en los Estados Unidos de Norteamérica, en el Condado de San Bernardino, California. Seguramente doña María Concepción ya tiene la nacionalidad norteamericana, porque fue candidata para alcaldesa de San Bernardino, donde le quitaron su registro porque no pagó la cuota correspondiente a los órganos electorales. Esta aspirante seguramente está participando por cuestiones de currículum o algún otro interés, porque supuestamente es una destacada empresaria en el vecino país del norte y allá se hace llamar Concepción Powell. Para los efectos de su interés, en aquel lado de la frontera, se quita el María. Poco podemos esperar de esta mujer desarraigada de sus raíces y de su patria. En fin, en este gran escaparate de los independientes hay de todo. Lo difícil es ponerse de acuerdo ahora que la ciudadanía ya despertó y no quiere candidatos de los partidos políticos. luissigfrido@hotmail.com